Acompañada por la ex candidata presidencial, Xóchitl Gálvez y el ex candidato a jefe de gobierno, Santiago Taboada; la alcaldesa electa por Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de La Vega, llegó hasta el Tribunal Electoral de la CDMX ( TECDMX) para denunciar que el magistrado presidente Armando Ambriz antes del sábado presentará un proyecto que busca anular su triunfo argumentando violencia política de género en contra de su contendiente, la morenista Caty Monreal.
“Esta semana pretenden darle un golpe a la democracia. Vengo a denunciar frente a su sede, para que me escuche bien el magistrado presidente Armando Ambriz, el compadre criminal de esta familia. Está circulando un proyecto para anularnos la elección en Cuauhtémoc, violando la ley y pasando por encima de la voluntad ciudadana, todo por cumplir con el encargo de la familia real, realmente corrupta”.
En el acto la ex candidata presidencial Xóchitl Gálvez sostuvo que Alessandra, al igual que ella, sufrió una campaña de acoso y hostigamiento y descartó que Alessandra haya cometido alguna ilegalidad pues fue ella la víctima de distintos atropellos, por parte del gobierno capitalino, del partido Morena, así como de la misma Caty Monreal.
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“El presidente, que sí era un superior jerárquico, ejerció violencia política contra mí, y el Tribunal pateó el bote y no lo resolvió, dijo que no, que más o menos, que quién sabe y no han resuelto el tema.
“Así es que yo le pediría a Armando Ambriz que no le busque tres piezas al gato, aquí no hubo violencia política en razón de género. La violencia política en razón de género es cuando a ti como mujer te impiden llegar a un cargo político por el hecho de ser mujer o te impiden ejercer el cargo político, pero ahora pareciera que decirte corrupta (contra Caty Monreal), ya es violencia política, pues no”.
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En entrevista posterior, Rojo de la Vega expresó su confianza de que sí se concreta este nuevo intento del TECDMX, volverá a recurrir a la sala regional Ciudad de México, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que ya le dio la razón a ella en dos ocasiones.
Descartó que el criterio de la sala se vaya a modificar en esta ocasión -aun cuando ya validó las diputaciones plurinominales a Morena en el Congreso-, pues no se justifica el argumento de que ella cometió ese tipo de violencia durante su campaña y tiene evidencias de que en su caso sí la hubo.