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La tragedia ocurrida en la calzada Ignacio Zaragoza, donde una pipa explotó el pasado 10 de septiembre, ha dejado a varios menores en estado crítico. En medio de la emergencia, la Fundación Michou y Mau, reconocida por su labor en el traslado y atención de pacientes con quemaduras severas, reiteró su disposición para apoyar a las autoridades en caso de que se requiera el traslado de los niños afectados al Hospital Shriners de Galveston, Texas.
En entrevista con MVS Noticias, el doctor Yannick Nordin, director médico de la fundación, explicó cómo funciona este proceso y cuáles son los criterios que determinan si un paciente puede recibir atención en Estados Unidos.
Apoyo dispuesto, pero con criterios médicos claros
El doctor Nordin aclaró que la fundación no toma decisiones de manera unilateral, sino que trabaja en conjunto con las autoridades y los médicos que atienden a los pacientes en primera línea.
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“En esta ocasión nos hemos puesto a disposición de las autoridades federales. Conocemos y sabemos que hay una respuesta por parte del gobierno federal, estatal y local de la Ciudad de México, y nosotros nos hemos puesto a disposición en caso de que se requiera algún apoyo. Es importante también no crear falsas expectativas: nosotros nos ponemos a disposición y, si ellos nos buscan, estamos dispuestos a apoyar”.
Asimismo, subrayó que los traslados al Hospital Shriners dependen de un comité médico especializado:
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“Hay un comité médico que nos reunimos y cada caso se analiza específicamente. La superficie corporal quemada es muy importante, el grado de profundidad de la quemadura también y en base a eso se toma la decisión. Hay pacientes que están tan quemados que pondremos en riesgo la vida de ellos al trasladarlos, y hay otros que pueden ser tratados localmente”.
Las primeras horas, determinantes en la atención
El especialista enfatizó que la urgencia no termina tras estabilizar al paciente en el hospital, ya que el tratamiento de quemaduras graves puede prolongarse por meses.
“Las primeras 24-48 horas son fundamentales en la atención del paciente, en que reciban una hidratación adecuada. Pero no es nada más porque se solucionaron las primeras horas, sino que es todo un proceso. El tratamiento de un paciente quemado puede ser hasta de seis meses y en algunos casos más de seis meses por las cirugías que se tienen que ir haciendo constantemente”.
¿Cuál es la situación actual de los menores quemados?
De acuerdo con la información que compartió la fundación, tras la explosión fueron reportados 18 pacientes menores de edad con quemaduras, de los cuales tres ya fueron dados de alta y 15 permanecen hospitalizados en distintos hospitales de la zona metropolitana.