Desayunar o cenar un vaso de leche con galletas es, para muchas personas, un alimento imprescindible en su día a día, pero, ¿qué pensarías si te dijéramos que el consumo diario de este lácteo no es tan benéfico, sobre todo para los adultos? De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Harvard, efectivamente, se trata de un hábito que deberíamos moderar y aquí te explicamos las razones.
Al hablar de Harvard, indiscutiblemente, una de las primeras imágenes que nos llegan a la cabeza tiene que ver con la casa de estudios ubicada en la ciudad de Cambridge, en Massachusetts, Estados Unidos, una de las más reconocidas a nivel mundial y, además, un referente para los estudiosos.
Cientos de jóvenes, año con año, buscan acceder a dicha institución, pero pocos lo logran. Y es que, en definitiva, el prestigio que ha ganado la universidad con el paso de los años parece ser irrefutable, motivo por el que sus estudios son sumamente relevantes para los científicos.
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¿Por qué los adultos no deben consumir leche a diario? Esto dice la Universidad de Harvard
Publicado en el New England Journal of Medicine, un reciente estudio realizado por la Universidad de Harvard nos revela por qué, para los adultos mayores, puede ser más dañino consumir leche a diario, siendo este uno de los mayores hábitos alimenticios de las personas.
Según lo que ha dado a conocer la institución, hay un índice alto de personas adultas que padecen de dolor en los huesos y fracturas en la cadera, en países donde se da un mayor consumo de este alimento.
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Por otro lado, la investigación refiere que tomar leche todos los días tiene más desventajas para la salud, sobre todo aquellos productos con grasas saturadas, sodio y otros elementos, los cuales son capaces de generar problemas de hipertensión y de circulación a largo plazo.
Ahora bien, eso no es todo, ya que, quienes consumen este lácteo a diario, podrían tener un mayor riesgo de desarrollar cáncer de próstata (en los hombres) y cáncer de endometrio (en las mujeres).
Para finalizar, la Universidad de Harvard indica que beber leche por lo menos tres veces al día es algo excesivo, por lo que la institución académica sugiere moderar dicho consumo, sobre todo cuando se entra a una edad en la que es necesario fijarse todavía más en los hábitos alimenticios.