Un equipo de astrónomos ha descubierto el primer río intergaláctico de estrellas, una estructura de 100 mil años luz de longitud que se extiende por el espacio entre dos galaxias.
El hallazgo, publicado en la revista Nature, supone un descubrimiento sin precedentes que abre nuevas preguntas sobre la formación y evolución de las galaxias.
El río, bautizado como Corriente Gigante de Coma, fue descubierto por Javier Román, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), mientras observaba halos de estrellas en las galaxias del cúmulo de Coma. La imagen captada por el Telescopio William Herschel, muestra una línea tenue de estrellas que se extiende por el espacio entre las galaxias NGC 4874 y NGC 4889.
Te podría interesar
La Corriente Gigante de Coma es 10 veces más larga que la Vía Láctea y, si se agrupa, podría formar un puente hacia la galaxia Andrómeda. Los astrónomos creen que el río se formó a partir de la colisión de dos galaxias enanas, que lanzaron sus estrellas al espacio.
¿Cómo luce el río intergaláctico?
La Corriente Gigante de Coma es una estructura tenue y difusa, que es difícil de observar a simple vista. En la imagen, se puede ver la Corriente Gigante de Coma como una fina línea que se extiende a lo largo del cúmulo de Coma. La línea está formada por estrellas jóvenes y viejas, que emiten diferentes tipos de luz.
Te podría interesar
La formación de las estrellas y galaxias
Hasta ahora, se creía que las estrellas se formaban únicamente dentro de las galaxias. Sin embargo, el hallazgo de la Corriente Gigante de Coma sugiere que también pueden formarse en el espacio interestelar.
Este hecho también abre nuevas preguntas sobre la evolución de las galaxias. Los astrónomos creen que el río intergaláctico de estrellas podría estar ayudando a alimentar las galaxias del cúmulo de Coma con nuevas estrellas.
El descubrimiento del primer río intergaláctico de estrellas es un hito importante en la astronomía. Este hallazgo abre nuevas perspectivas sobre la formación y evolución de las galaxias.