PERSONALIDADES

Así fue el paso de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” por la cárcel

El exmandatario nuevoleonés compartió anécdotas de su encierro, donde aseguró que convivía con custodios, leía constantemente y se mantenía en actividad física, aunque con fuertes restricciones para recibir visitas.

Jaime Rodríguez Calderón, exgobernador de Nuevo León, recordó con humor e introspección su experiencia en prisión.
Jaime Rodríguez Calderón, exgobernador de Nuevo León, recordó con humor e introspección su experiencia en prisión.Créditos: Archivo/ Cuartoscuro
Escrito en NUEVO LEÓN el

Con un tono entre serio y anecdótico, pero sin dejar de sonar irreverente como es su estilo, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” abrió un capítulo poco contado de su vida: su estancia en prisión tras su detención en 2022.

Entre recuerdos y confesiones, relató cómo fue pasar de ocupar la oficina más importante de Nuevo León, a estar recluido en una celda común.

Durante una entrevista con el influencer Melo Montoya, el ex gobernador dio a conocer sobre sus días dentro de las instalaciones de un CERESO Estatal, “Aquí estuvo El Bronco”, reconoció que escribió con un tenedor de plástico en la pared de su celda, según él mismo contó, ya que a su sentir, "No había más qué hacer".

Durante los días de reclusión, explicó que se refugió en la lectura. “Me ponía a leer libros, a platicar con los custodios. Me pusieron no sé cuántos cuidándome, pero terminé haciéndome amigo de ellos”, dijo.

A pesar de ese ambiente, subrayó que le prohibieron las visitas de amigos y familiares, situación que calificó como un trato distinto al de otros internos.

Rodríguez Calderón también habló de las caminatas que le permitían en el patio de la cárcel, una de las pocas actividades que le daban libertad de movimiento. “Caminaba muy temprano, de cinco a seis y media, y en la tarde otra vez si me daban chance. Eso me ayudaba mucho”, recordó.

El exgobernador reconoció que la enfermedad que lo aquejaba complicaba aún más su encierro, pero lejos de pedir favores o privilegios, dijo que optó por enfrentar su proceso legal: “Mis abogados querían sacarme rápido, pero yo les dije que no. Yo quería demostrar que no hice nada”.

Con ironía, contó que las autoridades lo vigilaban como si se tratara de un criminal de alto perfil. “Me pusieron cámaras como si yo fuera El Chapo… ¿y cómo me iba a escapar? Estaba todo cerrado”, dijo entre risas.

A la distancia, “El Bronco” asegura que la cárcel lo llevó a reflexionar sobre su vida, su familia y su carrera política. Y aunque reconoce que la experiencia no fue sencilla, concluyó: “Me trataron bien", reconoció el ex mandatario independiente.