El fiscal general del Estado, Javier Flores Saldívar, confirmó que los 11 adultos detenidos durante la fiesta clandestina realizada en una residencia de la colonia San Patricio fueron vinculados a proceso por delitos de narcomenudeo, quedando bajo resguardo domiciliario mientras avanza la investigación.
Flores Saldívar explicó que la decisión se tomó con base en los objetos asegurados por la autoridad municipal, donde se reportó el hallazgo de droga y un arma de fuego dentro del inmueble. A partir de estos elementos, la Fiscalía integró la carpeta de investigación y comenzó a delimitar posibles responsabilidades.
El fiscal detalló que el informe de la Policía de San Pedro no incluye entrevistas, nombres de asistentes ni referencias a otros actos ilícitos, por lo que el análisis se concentra únicamente en los indicios encontrados en la vivienda. Además, se revisa la procedencia del arma decomisada para determinar si es legal o si podría derivar en otro delito.
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Con la vinculación a proceso, los 11 imputados deberán comparecer ante un juez de control en las próximas audiencias, donde se definirá su situación jurídica y su posible participación en actividades de venta de droga al menudeo.
¿Qué fue lo que pasó?
Una fiesta clandestina en San Pedro dejó como saldo la detención de 11 personas, luego de que autoridades municipales intervinieran un domicilio donde se encontraban más de 350 menores de edad durante la noche del sábado y la madrugada de este domingo.
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El operativo comenzó cuando personal del C4 recibió un reporte sobre música a alto volumen en un inmueble ubicado sobre la calle Río Mónaco en la colonia San Patricio. Al llegar, oficiales municipales confirmaron que en el sitio se llevaba a cabo un evento sin autorización.
Además, un padre de familia alertó a las autoridades al señalar que su hija estaba dentro del mismo domicilio y no lograba comunicarse con ella, lo que motivó el despliegue policiaco.
Autoridades confirmaron que entre 350 y 400 menores de edad fueron localizados dentro del inmueble, muchos de ellos en aparente estado de ebriedad y sin acceso a comunicación con sus familias.
Los uniformados lograron asegurar decenas de botellas de alcohol, presunta droga, un arma corta calibre nueve milímetros, equipos de radiocomunicación, básculas, cascos balísticos y más de 100 mil pesos en efectivo, además de otros artículos relacionados con la operación del evento.
En cuanto a la situación de los menores de edad, los adolescentes de entre 14 y 17 años, fueron entregados a sus padres. Mientras que los presuntos involucrados de la fiesta clandestina fueron trasladados a las instalaciones del C2 Municipal y puestos a disposición del Ministerio Público por el presunto delito de corrupción de menores.