La diputada de Movimiento Ciudadano, Melisa Peña, hizo un llamado a los 51 Ayuntamientos de Nuevo León para fortalecer sus Reglamentos de Policía y Buen Gobierno, así como la normativa municipal aplicable, con el fin de atender la creciente contaminación acústica provocada por motocicletas con escape modificado.
Peña propuso que los municipios analicen la prohibición y sanción del uso de motocicletas cuyos niveles de ruido excedan los límites establecidos en la Norma Oficial Mexicana, que fija un rango permitido de 82 a 84 decibeles. Además, solicitó implementar operativos sistemáticos de verificación acústica en zonas residenciales y comerciales, así como considerar horarios de restricción para motocicletas que generen niveles elevados de ruido.
La legisladora subrayó los efectos nocivos del ruido excesivo en la salud:
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"La evidencia médica advierte que, a partir de los 85 decibeles, inicia el daño progresivo en el oído humano, pérdida auditiva irreversible, zumbidos permanentes, dolores de cabeza, falta de concentración y trastornos del sueño. Este Congreso no puede ser indiferente cuando la gente pide tranquilidad, el silencio que merecen nuestras comunidades no es un lujo, es una condición esencial para una vida digna", aseguró.
Peña señaló que, pese a que los municipios cuentan con atribuciones legales para regular estas conductas, la falta de operativos sistemáticos, de medición formal de decibeles y de criterios comunes ha permitido que el problema crezca sin control. Por ello, llamó a los Ayuntamientos a coordinarse, actualizar instrumentos normativos y establecer mecanismos permanentes de vigilancia.
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La diputada reiteró su compromiso de impulsar acciones orientadas a mejorar la seguridad, el orden y la calidad de vida en las comunidades de Nuevo León, especialmente en lo referente a problemáticas urbanas que afectan directamente a las familias.