La problemática del desempleo e informalidad que persiste en el país podría enfrentarse con estrategias coordinadas de gobierno que contemplen beneficios, incentivos y apoyo financiero, así como medidas de simplificación administrativa, para facilitar la incorporación de personas que trabajan en ese sector, a la formalidad, propuso la vicecoordinadora de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados, Noemí Luna.
La legisladora planteó reformas a la Ley para Impulsar el Incremento Sostenido de la Productividad y Competitividad de la Economía Nacional, con el fin de generar condiciones más adecuadas y menos complicadas para que las personas en la informalidad, se sumen al empleo formal y las empresas tengan capacidad de darles puestos.
Pidió añadir a la ley, que tendrá por objetivo “diseñar estrategias coordinadas que promuevan programas de beneficios, incentivos y apoyos financieros, así como políticas públicas de simplificación administrativa que favorezcan la incorporación de los entes económicos informales al sistema tributario y laboral”.
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Que la política nacional de fomento económico y el Programa Especial para la Productividad y la Competitividad, incluyan canalizar incentivos y facilidades económicas para la inclusión de entres económicos a la formalidad, agrega.
En artículos transitorios, prevé que el Ejecutivo Federal tendrá 90 días naturales a partir de la entrada en vigor de la norma, para realizar los cambios reglamentarios necesarios y hacerla efectiva.
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Informalidad a la alza
En su argumentación, la promovente indicó que de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y GEografía (INEGI), al pasado 27 de junio de 2025, la población ocupada en la informalidad llegó a 32.8 millones de personas, equivalentes a más del 55 por ciento del total de trabajadores.
Eso significa que hay más empleados informales que formales, lo que debilita la capacidad de recaudar del Estado, de sostener el sistema de seguridad social y de pagar pensiones, alertó.
La tasa de informalidad aumentó en los primeros meses de este 2025 con respecto a 2024, cuando la cifra promedio era de 53.7 por ciento. El aumento en ese indicador fue de más del 1 por ciento, agregó. Recordó que de los más de 134 millones de mexicanos, 59 millones tienen una ocupación, pero al menos uno de cada dos, está en el sector informal.
A ello se suma que de enero a mayo de 2025, se habrían perdido 461 mil empleos formales, y 1.1 millones de personas tuvieron que irse a la informalidad, agregó. Los datos del INEGI añaden que los sectores más afectados por la informalidad son el comercio minorista, la agricultura y servicios.
Las cifras confirman que los esfuerzos de la admninistración federal por abatir la informalidad y el desempleo no han sido eficientes como se esperaba, por eso es necesario dar una respuesta integral a los creadores de empleo, principalmente las micro, pequeñas y medianas empresas, dijo.
Sin acceso a crédito en condiciones laborales, incentivos fiscales, apoyo económico e incluso facilidades administrativas, las mipymes seguirán careciendo de capacidad para mantenerse en operación, crear empleos y sostenerlos, lo que seguirá favoreciendo la migración a la informalidad, alertó.
