En la Cámara de Diputados, los integrantes de la bancada de Morena pidieron a la Fiscalía General de la República (FGR), la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) federal, dictar medidas de protección a favor de la diputada María Teresa Ealy, que en días pasados recibió amenazas de muerte.
La vicecoordinadora de la fracción, Gabriela Jiménez, y el resto de sus compañeros, condenaron los hechos a los que calificaron de cobardes y como un acto de violencia de género.
Tras expresar solidaridad con la diputada Ealy Díaz, lanzaron un llamado urgente a que las autoridades señaladas le brinden protección para garantizar su integridad física, la de sus familiares y colaboradores que la propia legisladora advirtió, están en riesgo.
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No silenciarán a quienes denuncian violencia
Jiménez Godoy y los morenistas en San Lázaro afirmaron que no permitirán que con actos de violencia, se silencie a quienes promueven el respeto a los derechos de las mujeres, en este caso a través de la labor parlamentaria.
Señalaron que darán seguimiento puntual a la resolución del caso, así como acompañamiento permanente a la víctima hasta que los sucesos se esclarezcan, se encuentre a los responsables de amenazarla e intentar silenciarla por sus denuncias contra la violencia de género.
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Caso Cuauhtémoc Blanco
Al dar a conocer la recepción de las amenazas en su contra, la diputada Ealy Díaz expresó que éstas se registraron justo después de que acudiera a la Fiscalía de Morelos a solicitar que continúen las actuaciones en el caso del también diputado federal de Morena, Cuauhtémoc Blanco, que en semanas pasadas se libró del desafuero, luego de haber sido acusado por un delito de tipo sexual en grado de tentativa.
Los morenistas recalcaron que ninguna mujer en el país debe ser blanco de amenazas, intimidación, violencia por ejercer su trabajo legislativo y por denunciar actos de corrupción, impunidad y violencia.
La vicecoordinadora de Morena en San Lázaro recalcó que “levantar la voz no debe ser una sentencia” para quienes se atreven a ello.