Luego de que en la Cámara de Representantes se acordara reducir de 5 por ciento a 3.5 por ciento el impuesto a las remesas, la presidenta Claudia Sheinbaum lo calificó como “bueno” este ajuste a la baja.
No obstante, la titular del Ejecutivo dijo que ahora esta labor de convencimiento que se hizo previamente con legisladores estadounidenses, se llevará al Senado del vecino país del norte, pues el objetivo es que no haya ningún gravamen a las remesas, que en México equivalen al 3% del PIB.
“Pero en realidad Mexico es el único que hemos estado, pues hablando con congresistas y haciendo nuestro trabajo con organizaciones en Estados Unidos. También los paisanos estuvieron enviando cartas, correos electrónicos y posteando en las redes y vamos a seguir trabajando sobre este tema, para que pues no haya ningún impuesto a las remesas, y en particular con Mexico, pues porque además hay un convenio que establece que no debe cobrar dos veces el impuesto, es discriminatorio, pero es bueno por lo pronto que haya bajado de cinco a 3.5”, comentó.
Te podría interesar
La mandataria federal enfatizó que es interés del gobierno mexicano que no haya ninguna imposición tributaria a los recursos que nuestros paisanos envían desde Estados Unidos a sus familias, por lo que continuarán las acciones para persuadir a los senadores de ese país para que se respete el tratado de no doble tributación vigente desde 1994.
“Por lo pronto, la tasa del impuesto de la remesas y una disminución del cinco al 3.5%, todas maneras nosotros no queremos que haya impuesto entonces vamos a seguir trabajando informando a todas y todos, pero es algo que pues vale la pena reconocer y vamos a seguir trabajando para que no haya ningún impuesto a las remesas que envían nuestros paisanos a sus familias en México”, señaló.
