La iniciativa de reforma el Código Penal Federal, que sancionará la apología del delito ejercida a través de expresiones mediáticas como películas, música y series, se formalizó con su publicación en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados y la respectiva presentación en la Tribuna.
El promovente y vocero de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Arturo Ávila, explicó que el proyecto no limita la libertad de expresión.
Sin embargo, prevé sanciones a quienes promuevan, glorifiquen e inciten a la comisión del delito a través de contenidos en películas, canciones y series.
Te podría interesar
Llamado a productores de narcoseries y narcocorridos
Cuestionado respecto al mensaje que les envía a productores de narcoseries y creadores de narcocorridos, el congresista dijo que son personas muy respetables, pero se les pide que contribuyan a no ensalzar actividades y conductas ilícitas que pudieran incitar a los espectadores y consumidores, a replicarlas.
“Yo les diría primero que todo que son grandes artistas, yo reconozco las grandes capacidades que tienen para generar música, para musicalizar, para hacer canciones que verdaderamente son buenísimas, que nos ayuden, que nos ayuden a que cuando estén componiendo una canción no mandemos un mensaje equivocado para nuestras niñas, para nuestros niños, para nuestros jóvenes”, expresó.
Te podría interesar
Reforma disuasiva
Al ser cuestionado sobre cómo prevé que la propuesta se materialice en los hechos, qué autoridad se encargará de determinar qué contenidos mediáticos hacen apología del delito y qué personas en específico serán sancionadas en los términos que propone establecer en el Código Penal Federal, si los cantantes, los compositores, los productores de cine y series, los guionistas o los espectadores y consumidores, el parlamentario tuvo algunas dificultades para precisar.
Respondió que por el momento su propuesta es de tipo disuasivo, no tiene carácter penal, aunque sí propone aplicar las sanciones que ya existen y están vigentes para la apología del delito, y seguramente al ser analizada en comisiones generará debate y podría enriquecerse.
Antes, en la Tribuna, el diputado Ávila Anaya expuso su propuesta de modificaciones al artículo 208 de la norma penal.
Lo anterior, para establecer que el que provoque públicamente a cometer un delito, o haga la apología de éste o de algún vicio, a través de expresiones mediáticas como películas, canciones, obras de teatro, series y otras modalidades audiovisuales, se le aplicarán de 10 a 180, jornadas de trabajo en favor de la comunidad.
Si el delito que se promovió o se ensalzó, se comete, al provocador se le aplicará la sanción que le corresponda por su participación en el ilícito del que se trate.
Manifestó que los congresistas y la ciudadanía en general no debe ser tolerante ante “invitaciones” a cometer delitos y enfatizó que son los jóvenes los más vulnerables ante la exposición a materiales y contenidos mediáticos que enaltecen estilos de vida, acciones, hazañas e historias de quienes están involucrados en el delito.
Los espectadores podrían replicar esas conductas.
Puntualizó que la glorificación del delito vulnera derechos constitucionales.
Acotó que no se busca limitar la libertad de expresión, aunque ese no es un derecho absoluto, por lo que debe tener frenos cuando derive en la promoción de actos delictivos.
Es en ese caso cuando se justificará la intervención del Estado, dijo.
Recalcó que la apología del delito puede ser mala para niños y adolescentes, ya que atenta contra el desarrollo integral y ejercicio de sus derechos.
Crecer en un ambiente donde se glorifica y promueven conductas delictivas, no solo vulnera los derechos de niños y jóvenes, sino que puede representar riesgos para la seguridad pública, expresó.
Aclaró que su planteamiento no es punitivo porque no prevé penas privativas de la libertad, y tampoco impone más sanciones a la apología del delito porque estas ya están vigentes en la ley.
Recalcó que quiénes a través de expresiones culturales y mediáticas como películas, series, música, obras de teatro, videojuegos y en cualquier otra manifestación de ese tipo, favorezcan la imitación de conductas delictivas, deberán ser sancionados.
La propuesta en cuestión fue turnada a la Comisión de Justicia.