El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural , ha anunciado la suspensión inmediata de las importaciones de carne de cerdo procedentes de España. La medida sanitaria responde a la detección de un brote de Peste Porcina Africana (PPA) en la localidad de Cerdanyola del Vallès, en Barcelona.
La decisión fue tomada después de que el viernes se confirmara la presencia del virus en dos jabalíes silvestres, marcando el primer caso de PPA en el país europeo desde 1994. El brote se intensificó este sábado con el hallazgo de otros cuatro jabalíes muertos en la sierra de Collserola, la misma zona del primer hallazgo.
Primeros casos detectados en jabalíes silvestres
La suspensión de importaciones fue implementada por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica). Según informó Agricultura, la medida se mantendrá "en tanto se recibe información zoosanitaria sobre la atención del brote".
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El organismo destacó que la prohibición incluye carne de cerdo, productos y subproductos como jamones, salchichas, productos madurados, despojos porcinos para consumo humano y materia prima para la elaboración de alimentos para mascotas. La restricción aplica tanto para importación comercial como para productos transportados por viajeros.
Este sábado se informó del hallazgo de otros cuatro jabalíes muertos por la PPA en la sierra de Collserola (Barcelona), en la misma zona en la que se encontraron los cuerpos de los dos primeros animales fallecidos por este brote.
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Impacto Global de la Alerta Sanitaria
La detección de la PPA no solo afectó a México, sino que tuvo un impacto inmediato en el comercio cárnico global. La alerta provocó la suspensión de alrededor de 120 certificados sanitarios de exportación a cerca de 40 países a nivel mundial, incluyendo importantes mercados como Rusia, Estados Unidos, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Estados Unidos, Filipinas, Japón y México.
La peste porcina africana es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a jabalíes europeos, facóqueros africanos y cerdos domésticos de granja. Según los expertos, no representa un riesgo para los humanos ni se transmite por el consumo de productos de cerdo; sin embargo, su propagación puede causar grandes pérdidas económicas en la industria porcina, debido a la necesidad de controlar la población afectada y suspender exportaciones.
Ante esta nueva emergencia sanitaria, las autoridades instan a los importadores y viajeros a respetar las restricciones, con el objetivo de proteger la sanidad del ganado mexicano y evitar que la enfermedad afecte la producción nacional.
Con esta acción, México refuerza su compromiso con la seguridad alimentaria y la protección del sector porcino, en un contexto donde la detección temprana de la PPA es clave para evitar una crisis sanitaria y económica.