El cuerpo de Hipólito Mora Chávez, fundador de los Grupos de Autodefensa, es velado en lo que fue su hogar en su natal pueblo de La Ruana, en el municipio michoacano de Buenavista Tomatlán, donde ayer fue asesinado con tres de sus escoltas.
En un féretro de madera, sobre el que fue colocado su inconfundible sombrero calentano, Hipólito Mora es despedido por familiares y amigos, así como por habitantes de La Ruana, donde el 24 de febrero del 2013 organizó un levantamiento en armas en contra del entonces cártel hegemónico de “Los Caballeros Templarios”.
En tanto, los tres escoltas que murieron con Mora Chávez recibieron un homenaje póstumo por funcionarios y agentes de la Guardia Civil, la Policía Estatal, a la que pertenecían.
Te podría interesar
Hipólito Mora fue asesinado por al menos 15 sicarios que viajaban en dos camionetas, con las que interceptaron el vehículo blindado marca Chevrolet, tipo Tahoe, que tripulaba el autodefensa, escoltado por una patrulla de la Guardia Civil.
Los gatilleros usaron rifles antiblindaje tipo Barret e incendiaron la camioneta Tahoe, asesinando a Hipólito Mora y a tres de sus escoltas.
Te podría interesar
Mora Chávez era originario de La Ruana, donde se levantó en armas el 24 de febrero del 2013, contra el cártel del de "Los Caballeros Templarios", cuyos principales líderes eran los narcotraficantes Nazario Moreno “El Chayo”, Jesús Méndez “El Chango Méndez”, Servando Gómez “La Tuta”, Enrique Plancarte “El Kike” y Dionisio Loya “El Tío”.
El fundador de las autodefensas había sobrevivido a dos atentados: el primero ocurrió el 26 de noviembre del 2022, y otro más el 4 de marzo del presente año, ambos en el poblado de La Ruana.