La presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, afirmó que los jueces tienen la obligación de no defraudar la confianza ciudadana, pues su labor como mecanismo para preservar la paz social persistirá mientras mantengan su credibilidad.
Al clausurar el primer congreso internacional de Ética y legitimidad judicial, la también titular del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) sostuvo que el Poder Judicial de la Federación está llamado a poner a las personas y a sus derechos en el centro de sus decisiones, además de responder con cercanía y sensibilidad a las necesidades de quienes se acercan a la justicia federal, pues sólo así se garantizará la legitimidad de la Constitución.
“La labor de los Poderes Judiciales como un mecanismo para conservar la paz social persistirá, mientras persista su credibilidad. Mientras las personas confíen en la institución, mientras tengan la convicción de que los jueces y las juezas daremos soluciones justas a sus problemas con apego estricto a la legalidad y a los derechos humanos. Por ello, es obligación de las personas juzgadoras estar a la altura de estas expectativas y nunca decepcionar esa confianza”.
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Piña Hernández dijo que se viven tiempos convulsos donde la legitimidad de los Poderes Judiciales es cuestionada, motivo por el cual se deben dar respuestas efectivas a las exigencias ciudadanas.
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“Si el Poder Judicial Federal, y cualquier otro, da respuestas tardías, insuficientes o arbitrarias, no solo se compromete el acceso efectivo a la justicia, sino fundamentalmente la credibilidad de la institución. Vivimos tiempos convulsos donde la legitimidad de los Poderes Judiciales es cuestionada. Esto no sólo ocurre en México, ocurre en distintas democracias constitucionales”.
La titular de la Corte enfatizó que nuestro país atraviesa un contexto sumamente complejo desde una perspectiva política, social y económica, donde las demandas de la ciudadanía se agravan por los problemas estructurales que aquejan a la sociedad, como la violencia y la desigualdad económica y social.