El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar confirmó que su país ya trabaja en la solicitud de extradición contra Ovidio Guzmán, uno de los líderes del Cártel de Sinaloa y actualmente preso en el penal del Altiplano.
“Trabajamos muy cerca con el gobierno mexicano, lo que pasó con Ovidio Guzmán eso fue operación del gobierno de México, les damos las gracias al gobierno de México, también estamos trabajando con el gobierno de México para que nos lo manden a los Estados Unidos con una extradición”, informó.
En conferencia de prensa, Salazar dijo que si bien no hay plazo para desmantelar a los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, ya trabajan con el gobierno mexicano para dicho fin.
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Afirmó que los esfuerzos siempre serán respetando la soberanía de México; “trabajamos muy de la mano con el gobierno mexicano”.
Luego de la reunión de alto nivel entre las delegaciones de México y EU en Washington, el diplomático enlistó ocho acciones en las que ambos gobiernos trabajarán de forma coordinada para detener el flujo de armas y combatir el fentanilo.
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“Lo importante es que sabemos de dónde viene, sabemos algunas de las empresas y sabemos hasta más que se involucran en este delito, entonces en eso vamos a trabajar con el esfuerzo del gobierno de Estados Unidos y con el compromiso del gobierno de México para parar esos precursores que llegan a los puertos de México que se van trasladando al norte y que cruzan las fronteras de México Estados Unidos”.
Como parte de las acciones, informó que se hará todo lo posible para frenar los precursores de China a México y que se introducen a los Estados Unidos, lo que implica realizar investigaciones contra empresas chinas y personal en 10 países del mundo.
Además, llevar a cabo operaciones en 47 estados de Estados Unidos para quebrar las cadenas de la delincuencia; el combate frontal contra los cárteles de la droga porque ahora no son solo de México, sino que operan Guatemala, Colombia, China y en Europa, lo que implica un esfuerzo global.
De igual forma, continuar la ruta del lavado de dinero con el que se compran armas que provocan la violencia; reforzar la vigilancia en puertos y aduanas de México y Estados Unidos.
Además, fortalecer el intercambio de información con el gobierno mexicano; "trabajar como socios" lo que representa apoyar a los ciudadanos; combatir de forma global el flagelo de las drogas, por las consecuencias graves que acarrea en ambas naciones y en otras más, y enfocarse en la prevención y educación para que los jóvenes tengan alternativas de trabajo, apoyo y educación.