En la Cámara de Diputados, la bancada del PAN refrendó su alerta sobre la minuta aprobada en el Senado, cuyo fin es pasar los recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, estimado en 109 mil millones de pesos, al IMSS Bienestar.
El diputado Éctor Jaime Ramírez sentenció que el proyecto que está avanzando en el legislativo “en lo oscurito” y con improvisación, y que tiene como fin cumplir las promesas del Ejecutivo Federal sobre los servicios de salud, será un nuevo “fracaso”, como el de la creación del llamado Instituto de Salud para el Bienestar, INSABI.
En redes sociales, el congresista aseveró que dicha reforma en materia de salud, tendrá efectos tan negativos para la población como la desaparición del Seguro Popular, y la creación del fallido INSABI.
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“De autoregalo de fin de año Morena se quiere adueñar de los recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud que se transfieren a las entidades federativas, 109 mil millones Todo el dinero lo quieren concentrar en manos del nuevo experimento llamado IMSS-BIENESTAR Aprobarán una nueva reforma al sistema de salud, que como las otras, cuando desaparecieron el Seguro Popular y luego al INSABI, se hace en lo oscurito y con toda improvisación ¡Será otro fracaso en salud, para quedarse con el dinero!”, advirtió en su cuenta en la red social X, antes Twitter, @ectorjaime.
Alerta en San Lázaro por reforma de salud
Ramírez Barba añadió, en otro mensaje largo publicado en redes, que la reforma en cuestión ya pasó por el Senado de la República.
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Al alertar que próximamente podría avanzar en la Cámara de Diputados, el legislador dio a conocer parte del contenido.
Aseveró que los estados perderán el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, cuyos recursos se concentrarán en el nuevo mecanismo, el IMSS-Bienestar, cuya implementación ha generado controversia y resistencia en las entidades federativas.
“Es una centralización abusiva, que afectará a la población, dejándolos sin los recursos que por ley estaban etiquetados a sus Estados. Se mandan los recursos a una institución que no tiene reglas de operación, ni transparencia, que no tiene un modelo de atención y no tiene criterios para distribuir equitativamente el presupuesto en los Estados”, externó.
Los cambios también eliminan la obligación de enviar recursos al Fondo de Salud para atender enfermedades graves, añadió.