Desde la Oficina Oval, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a presumir su control sobre la política mexicana, al afirmar que “México hace lo que le decimos que haga”.
La declaración se dio en medio de una conferencia de prensa, cuando fue cuestionado sobre el acercamiento de Brasil, México y otros países de América Latina con China debido a los aranceles estadounidenses.
El mandatario aseguró no estar preocupado por esta relación y destacó que, en términos económicos, su gobierno “está superando a todos, incluida China”. Además, dijo que naciones como México y Canadá “obedecen” las directrices de su administración y que ahora sus fronteras están bajo “control total”, a diferencia de lo que calificó como una situación “horrible” en el pasado.
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¿En qué contexto se dan estas declaraciones?
Las palabras de Trump llegan apenas dos días después de que el gobierno mexicano entregara voluntariamente a 26 reos a Estados Unidos, un acto que fue reconocido públicamente por Washington. El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, aclaró que la extradición fue a solicitud del gobierno estadounidense y que no se recibió nada a cambio.
Asimismo, sus dichos se produjeron después del reciente acuerdo comercial que aplazó por 90 días la imposición de nuevos aranceles a México, en el que Trump también agradeció la cooperación de la administración mexicana.
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Aunque no los vinculó de forma directa, este señalamiento ocurre en un contexto en el que, en distintos hechos recientes, el gobierno de Estados Unidos ha resaltado la colaboración con nuestro país.
Las declaraciones de Trump, que combinan elogios y señalamientos de subordinación, se suman a un historial de comentarios polémicos hacia México, lo que mantiene tensas las percepciones sobre la relación bilateral.