El líder de la Iglesia La Luz del Mundo, Naasón Joaquín García, enfrentó su primer revés significativo en el proceso penal que se le sigue en una corte federal de Manhattan, luego de que la jueza Loretta Preska autorizó una orden que le impide ver o escuchar parte de la evidencia considerada sensible.
La determinación se dio pese a los argumentos presentados por los abogados de García, pertenecientes a la firma Werksman Jackson & Quinn LLP, quienes solicitaron acceso total al material probatorio. Sin embargo, la jueza del Distrito Sur de Nueva York respaldó la solicitud de los fiscales federales para imponer restricciones sobre la evidencia que podría poner en riesgo la seguridad de las personas vinculadas al caso.
¿Cuáles son los delitos que enfrenta Naasón Joaquín García?
De acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Naasón Joaquín enfrenta múltiples acusaciones por delitos graves, entre ellos abuso sexual, pornografía infantil, crimen organizado y delitos financieros. Las autoridades lo señalan como el líder de una organización que, bajo el amparo de su estructura religiosa, habría cometido actos de explotación sistemática durante años.
Te podría interesar
Cuatro niveles de confidencialidad en la evidencia
El pasado 10 de octubre, los fiscales solicitaron a la Corte que la entrega de pruebas a la defensa se realizara bajo cuatro categorías de confidencialidad, estableciendo límites en el manejo de materiales particularmente delicados.
Entre las categorías más estrictas figura la denominada “Solo para los ojos de la defensa” (AEO, por sus siglas en inglés), que permite a los abogados revisar ciertos documentos o videos sin compartirlos ni comentarlos con el acusado. La solicitud se sustentó en la Regla 16(d) de las Reglas Federales de Procedimiento Penal, que faculta a los jueces a restringir el acceso a pruebas cuando se justifica por motivos de seguridad o confidencialidad.
Te podría interesar
Los abogados de García objetaron la medida el 17 de octubre, argumentando que limita su derecho constitucional a una defensa adecuada, pues les impediría discutir con su cliente toda la información disponible.
¿Qué argumentan los fiscales?
Los fiscales precisaron que la evidencia incluye una gran cantidad de material digital: correos electrónicos, registros financieros, datos de teléfonos celulares, videos y fotografías. Parte de esa información, advirtieron, podría comprometer la privacidad de terceros o afectar investigaciones en curso si se divulga antes del juicio.
El intercambio de pruebas entre la fiscalía y la defensa marca una etapa clave antes del juicio, pues permite a los acusados conocer la fuerza del caso en su contra y definir si buscan un acuerdo o van a juicio.
Según los registros judiciales, la próxima audiencia de revisión está programada para el 15 de diciembre, cuando se evaluará el avance en la clasificación y entrega del material probatorio.
Debido a la magnitud del caso y a la cantidad de evidencia, los analistas estiman que un eventual juicio podría celebrarse hasta la segunda mitad de 2026.
Actualmente, Naasón Joaquín García permanece recluido en la Cárcel Metropolitana de Brooklyn, donde también se encuentran otros reclusos de alto perfil, como Ismael “El Mayo” Zambada, Servando Gómez “La Tuta” y Rafael Caro Quintero.