Este martes 19 de noviembre, un atropello masivo en una escuela primaria de la ciudad de Changde, provincia de Hunan, dejó a varios estudiantes heridos. Según reportó la cadena estatal CCTV, el incidente ocurrió en las primeras horas del día cuando los alumnos se disponían a ingresar al colegio. Las autoridades ya detuvieron al presunto responsable, un hombre de 39 años identificado como Huang.
Este es el segundo caso de atropello masivo en menos de una semana, lo que generó preocupación entre la ciudadanía. Aunque las lesiones de las víctimas no ponen en riesgo sus vidas, el ataque reavivó el debate sobre la creciente inseguridad en el país, especialmente en zonas concurridas como escuelas y centros deportivos.
Detalles del atropello en la escuela primaria Yong’an
El incidente ocurrió frente a la escuela primaria Yong’an, alrededor de las 7:37 a.m. hora local. Testigos relataron que un vehículo embistió a un grupo de estudiantes que caminaba hacia la entrada del colegio. La policía de Changde detuvo al conductor poco después de los hechos, iniciando una investigación para esclarecer los motivos del ataque y determinar la gravedad de las heridas de las víctimas.
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En redes sociales, la noticia generó indignación y miedo entre los usuarios. A pesar de los estrictos controles informativos del régimen chino, circulan rumores que apuntan a un acto premeditado. Mientras tanto, los videos compartidos en plataformas internacionales muestran escenas de pánico y caos, con niños corriendo y transeúntes intentando socorrer a los heridos.
Preocupación por la seguridad en espacios públicos
Este nuevo atropello masivo en China se suma a otros ataques similares recientes, lo que pone en evidencia una preocupante tendencia. La semana pasada, un hombre embistió con su vehículo a una multitud en Zhuhai, dejando 35 muertos y más de 40 heridos. Expertos señalan que estos incidentes reflejan tensiones sociales latentes en una población enfrentada a desafíos económicos y psicológicos.
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El gobierno prometió medidas para garantizar la seguridad en espacios públicos, pero la población exige respuestas más contundentes ante estos episodios de violencia. La investigación del caso de Changde será clave para entender si este ataque se relaciona con patrones previos o si responde a un motivo aislado.