El Fiscal General de los Estados Unidos, Merrick Garland, advirtió el martes que Ovidio Guzmán, narcotraficante mexicano e hijo de Joaquín "el Chapo" Guzmán, no será el último en ser extraditado como parte de la lucha contra el fentanilo.
Estas declaraciones las hizo Garland durante un encuentro con familias que han perdido seres queridos a causa de sobredosis de fentanilo, llevado a cabo en las instalaciones de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA) en Arlington, Virginia.
Hace dos semanas, extraditaron a Ovidio Guzmán López, quien lideraba una facción el Cártel de Sinaloa y es hijo del famoso Chapo. Él es uno de los doce líderes de cárteles que hemos logrado extraditar a los Estados Unidos, y quiero enfatizar que no será el último en enfrentar la justicia", declaró Garland, recibiendo aplausos como respuesta.
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Garland destacó que tanto la fiscalía estadounidense como la DEA están trabajando arduamente para llevar ante la justicia a aquellos individuos que ponen en peligro a los ciudadanos de los Estados Unidos al traficar con "drogas mortales."
Ovidio Guzmán, quien fue detenido en México en enero, fue extraditado a los Estados Unidos el 15 de septiembre y está actualmente detenido en una prisión en Chicago, a la espera de juicio por cargos de tráfico de drogas.
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Gobierno estadounidense exige captura de los Chapitos
El gobierno estadounidense también ha solicitado a México la captura y extradición de los otros hijos de "el Chapo": Iván Archivaldo Guzmán, Jesús Alfredo Guzmán y Joaquín Guzmán, quien cumple condena de cadena perpetua en los Estados Unidos.
Garland denunció que los cárteles de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) están contribuyendo a la epidemia de fentanilo en los Estados Unidos, una epidemia que el año pasado causó la muerte de más de 70,000 personas debido a sobredosis de este opioide sintético.
Según Garland, estos cárteles compran productos químicos en China que luego utilizan para fabricar fentanilo en laboratorios clandestinos en México, el cual es posteriormente traficado a los Estados Unidos.
En lo que va del año, la DEA ha confiscado más de 55 millones de pastillas de fentanilo, una droga que es 50 veces más potente que la heroína.
La voz de Garland quebró mientras compartía la historia de un hombre de Missouri que murió debido a un medicamento adulterado con fentanilo, dejando atrás a un hijo de 2 años.
"Estamos haciendo este trabajo en honor a personas como él, para recordarlos", afirmó Garland en relación a las víctimas de sobredosis de fentanilo.
Por su parte, la directora de la DEA, Anne Milgram, acusó a los cárteles mexicanos de ser responsables de la devastación que enfrenta Estados Unidos y advirtió que el Gobierno de Joe Biden no puede tolerar más muertes causadas por las drogas.
Milgram también explicó que Estados Unidos no solo persigue a los líderes de los cárteles, como Ovidio Guzmán, sino también a todos los involucrados en la cadena de suministro, mencionando que dos ciudadanos chinos fueron arrestados por su conexión con una empresa que vende productos químicos utilizados en la fabricación de fentanilo.
Con información de EFE.