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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, el periodista especializado en temas de seguridad José Luis Montenegro analizó la llegada a México de Hernán Bermúdez Requena, conocido como el Comandante H., señalado como presunto líder de La Barredora, célula delictiva vinculada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Su captura y traslado desde Paraguay han desatado un intenso debate sobre los posibles nexos políticos que le habrían permitido operar durante años sin ser detenido.
“Hay más preguntas que respuestas”, afirmó Montenegro, al destacar la complejidad del caso y recordar que Bermúdez Requena había permanecido en la penumbra, pese a que su nombre figuraba en reportes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
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“Los informes de la Sedena señalaban su implicación en delitos en Chiapas, Tabasco y Campeche; sin embargo, parecía que esta información no llegaba al presidente”, indicó.
La falta de información sobre su fortuna y operaciones criminales ha suscitado preocupación. "Se ha acostumbrado en administraciones anteriores a jugar con las cifras, y eso parece ocurrir de nuevo", agregó, cuestionando la transparencia del gobierno.
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"Claro que sabía el expresidente López Obrador, claro que sabía Adán Augusto López, a quien nombró y por supuesto la administración del posterior gobernador de Tabasco, Carlos Manuel Merino Campos también supo y lo solapó en esa posición", destacó.
Implicaciones políticas: el caso de Hernán Bermúdez Requena
Durante la conversación, José Luis Montenegro reflexionó sobre la importancia de que Bermúdez Requena colabore o dé información. “Si habla, podría tensar aún más las relaciones políticas en el país y revelaría un entramado que podría involucrar a muchos otros”, sugiriendo que su testimonio podría tener repercusiones significativas en la política actual.
En ese sentido, el analista cuestionó el papel de figuras como Adán Augusto López, exsecretario de Gobernación, y la respuesta de la actual presidenta Claudia Sheinbaum.
“La presidenta ha señalado que las investigaciones dirán, pero eso ya suena a una advertencia para guardar silencio frente a datos comprometedores”, señaló Montenegro.
También advirtió que la falta de avances en casos emblemáticos por parte de la Fiscalía General de la República ha deteriorado la confianza en el sistema de justicia.
¿Qué sigue para Hernán Bermúdez Requena a su llegada a México?
Destinado a un penal de alta seguridad, el Altiplano, la interrogante sobre las condiciones reales de su encarcelamiento se mantiene. "Es un penal con historial de fugas y privilegios, hay que ver cómo se manejará su situación", expresó.
La llegada de Hernán Bermúdez Requena representa un desafío considerable para el gobierno mexicano, que enfrenta presiones no solo internas, sino también externas. A medida que se desarrollan los acontecimientos, la ciudadanía espera respuestas claras y justas que aborden la profunda raíz del problema del crimen organizado en México.