Extorsión en México: 'ya me habían hecho cargos por más de 225 mil pesos': Gloria

En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Gloria, víctima de estafa, toca el tema de la nueva forma de estafa frente a los ojos de todos.

Una supuesta promoción de bebidas gasificadas terminó en una estafa de más de 225 mil pesos para Gloria, quien compartió su testimonio sobre cómo cayó en una dinámica que parecía inofensiva pero resultó ser una trampa bien estructurada y frente a los ojos de todos.

“Voy saliendo de desayunar y me topo con una camioneta forrada con una marca de aguas gasificadas, con cinco o seis jóvenes uniformados. Me ofrecieron bebidas gratis si jugaba una ruleta promocional. Todo parecía legal”, relató.

¿Cuál fue el modus operandi de la estafa?

La dinámica era simple: tirar una ruleta dentro de un “food truck” decorado con la marca. Tras sacar 60 de los 100 puntos necesarios para “ganar un iPhone”, Gloria recibió bebidas ya abiertas y fue alentada a seguir jugando. "Te dicen que tienes muchísima suerte, que nadie ha ganado tanto. Y te insisten en probar el agua, fría y deliciosa", agregó.

A medida que acumulaba puntos, le ofrecieron un tercer tiro “por solo 50 pesos”. Con cada nuevo intento, obtenía “comodines” que duplicaban su puntaje y premios. Le aseguraban que estaba cerca de ganar dos iPhones y la incitaban a seguir pagando. “Te dicen que si te vas, pierdes todo. Me ofrecían tiros extra y me decían: ‘No le digas al contador que te lo regalé’”.

Poco a poco, los cobros se volvieron más altos. “Me dijeron que el siguiente tiro costaba 100 mil pesos. Ahí fue cuando revisé mi celular y vi que ya me habían hecho cargos por más de 225 mil pesos. Entré en shock”, explicó.

¿Manipulación psicológica?

Gloria asegura que durante el proceso comenzó a sentirse confundida, como si estuviera bajo un efecto que no reconocía. “Sentía un éxtasis extraño, me decían que respirara y tomara más de la bebida. También ofrecían dulces a los demás. Algo había ahí que no me permitía reaccionar”.

Cuando decidió irse, notó que a otras personas les decían exactamente lo mismo que a ella: "¡Qué suerte tienes!", “¡Un comodín más!” y “¡Contador, mira esto!”. Concluyó que todo el sistema estaba diseñado para enganchar emocionalmente a las víctimas, hacerlas sentir afortunadas y presionarlas a seguir pagando.

Desde que hizo público su caso, ha recibido cientos de testimonios similares. La estafa, disfrazada de activación comercial, está creciendo.

"Era imposible ganar. El tablero estaba manipulado. Todo estaba diseñado para que perdieras dinero, no para que ganaras nada", finalizó Gloria.