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En entrevista para MVS Noticias con Manuel López San Martín, Ricardo Peralta, profesor de Derecho Penal en la UNAM y exsubsecretario de gobernación, realizó un análisis de la controversia en torno a los narcocorridos y su prohibición en algunos lugares del país.
"Estamos en una condición de negar la realidad al esconder expresiones artísticas. Esto es como acercarnos al oscurantismo, donde sólo existía un pensamiento único,” mencionó y destacó que la censura podría generar efectos contrarios, promoviendo la clandestinidad y la ilegalidad.
El profesor también señaló que los narcocorridos forman parte de una narrativa social arraigada en la realidad de muchas regiones del país: “Hay un idilio secreto entre la sociedad mexicana y el narcofolclore, evidente en el éxito de narcoseries, obras pictóricas y, por supuesto, la música,” dijo.
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Una realidad que no se puede ignorar
De acuerdo con Peralta, los narcocorridos son un reflejo de la situación del país: “Antes de prohibir, debemos cambiar la realidad nacional para que eventualmente se canten otras cosas,” indicó. Asimismo, enfatizó que prohibir estas expresiones artísticas podría debilitar al Estado de derecho y fomentar la corrupción.
“La música, como cualquier expresión artística, debe ser disruptiva y generar debate, pero bajo ninguna circunstancia debe ser clausurada o censurada,” agregó. En este contexto, propuso que la solución radica en regular, no en prohibir.
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Regular narcocorridos antes que prohibir
El exsubsecretario comparó el debate sobre los narcocorridos con otros temas pendientes en la agenda legislativa, como la regulación del cannabis. “Llevamos más de 40 años de atraso en regulaciones clave. Regular los narcocorridos permitiría garantizar el respeto a las libertades individuales sin promover conductas antisociales,” explicó.
Sin duda, el debate sobre los narcocorridos pone en evidencia la necesidad de abordar el tema con una visión amplia y equilibrada. Como concluyó Ricardo Peralta, “Prohibido prohibir. La libertad de expresión y el respeto por las elecciones individuales deben prevalecer, pero también debemos trabajar para transformar la realidad que inspira estas narrativas.”