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En entrevista con Manuel López San Martin para MVS Noticias, Eraclio Rodríguez Gómez, líder del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano explica que campesinos exigen nuevo modelo económico para rescatar el campo mexicano.
La tensión en el sector agrícola de México está en su punto más alto. Liderados por Heraclio Rodríguez Gómez, del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano, los campesinos han intensificado sus protestas durante los últimos días. "No podemos regresar a nuestras casas con las manos vacías", manifestó Rodríguez en una reciente entrevista con Manuel López San Martín.
Los agricultores han llevado a cabo bloqueos en carreteras y puentes internacionales en al menos 22 estados del país, desafiando las críticas del gobierno por minimizarlos como un grupo pequeño. Rodríguez aseveró: "Nosotros calculamos que más de seiscientos mil campesinos están juntos en esta lucha".
Campo y Gobierno: Negociaciones Fallidas
A pesar de la urgencia, la situación se complica por la falta de voluntad de diálogo en las mesas de trabajo. Rodríguez señaló la ausencia de la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, en las negociaciones como un claro signo de desinterés del gobierno. "No sirve de nada que algunos funcionarios estén si no están dispuestos a hablar".
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Los campesinos demandan cambios urgentes sobre la ley del agua y una regulación efectiva de los mercados, temas cruciales para la viabilidad de su trabajo y la seguridad de sus familias. "Necesitamos una ley del agua que reconozca nuestras extracciones", enfatizó, anticipando que, sin acuerdos, el campo podría enfrentar una crisis irreversible.
La crítica no se detiene
El gobierno ha criticado a los campesinos, sugiriendo que su movimiento es manipulado por otros partidos políticos. Rodríguez desestimó estas afirmaciones, considerando que hacen más daño que bien. "Nos tienen que escuchar, si no, este conflicto se intensificará aún más".
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Las protestas continúan sin una solución a la vista. Con un sector tan fundamental en riesgo, queda por ver si el gobierno se hará eco de las demandas del campo antes de que las consecuencias se vuelvan más severas. Es un momento crítico para las familias que dependen del campo: la pregunta ahora es, ¿habrá respuesta antes de que sea demasiado tarde?
