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En su colaboración para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Pedro Tello Villagrán, consultor en economía, abordó la preocupante caída en la producción de prendas de vestir "Hecho en México".
El especialista invitó a los oyentes a revisar sus propias prendas para ver cuántas de ellas todavía llevan la etiqueta.
Destacó que "es cada vez menos común portar alguna prenda de vestir que haya sido confeccionada justamente en el territorio nacional".
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¿Por qué va en declive el ‘Hecho en México’?
El consultor explicó que la importación de ropa desde China, otros países asiáticos y Centroamérica, junto con el crecimiento de las compras a través de aplicaciones en línea, ha reducido significativamente el mercado disponible para los fabricantes nacionales.
Además, el contrabando de ropa, la venta de ropa usada en tianguis y la subvaluación de prendas importadas han exacerbado los problemas para la industria mexicana.
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"Todos estos factores han creado un ambiente que ha generado problemas crecientes para los fabricantes de prendas de vestir en nuestro país", afirmó Tello Villagrán.
Los datos son claros: "Los obreros y empleados que laboran en la elaboración de prendas de vestir acumulan 18 meses consecutivos con números rojos".
Esto indica una contracción en la capacidad generadora de empleos en la industria del vestido.
La capacidad de producción también se ha visto afectada. En los primeros cinco meses de 2024, solo se está aprovechando el 68 por ciento de la capacidad de producción instalada en este sector.
"Estamos hablando de la lectura más baja en lo que la capacidad aprovechada se refiere, por lo menos de los últimos 5 años", señaló.
Además, la producción de la industria de la confección en México ha retrocedido más del 7 por ciento en el primer trimestre de 2024, alcanzando seis trimestres consecutivos con números rojos.
"La industria de la confección en México vive uno de sus momentos más desafiantes", concluyó Tello Villagrán.
Para ilustrar este punto, Pedro Tello Villagrán sugirió a los oyentes que revisen la etiqueta de sus prendas cotidianas, desde pantalones y camisas hasta calcetines y ropa deportiva, para ver cuántas de ellas tienen el ‘Hecho en México’ y cuántas proceden del exterior.