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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, Víctor Ramírez, socio de la consultora Consultores en Energía y Asuntos Públicos, nos compartió que el presidente Andrés Manuel López Obrador no acepta las propuestas de Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez respecto a las refinerías de Cadereyta y Madero.
Ramírez comenzó destacando las importantes pérdidas económicas del Sistema Nacional de Refinación el año pasado, cifradas en 74 mil millones de pesos, lo que equivale a unos 202 millones de pesos diarios. Estas pérdidas, según Ramírez, son resultado de la ineficiencia operativa de las refinerías, además de problemas de emisiones tóxicas, como óxido de azufre, que afectan la salud de la población y representan un gasto innecesario para el país.
'Plazo máximo de refinerías es de 50 años'
El presidente López Obrador, según Ramírez, basa su postura en un concepto de soberanía asociado al petróleo, pero no necesariamente a una soberanía energética moderna. A pesar de esto, el gobierno actual ha apostado por incrementar la generación de energía eléctrica mediante gas natural, lo cual plantea un dilema de congruencia respecto a mantener en operación refinerías que contaminan y afectan las finanzas públicas.
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En cuanto a la modernización de refinerías, Ramírez señaló la importancia de realizar un análisis detallado para determinar cuáles valen la pena mantener y cuáles cerrar. Destacó que, en un plazo máximo de 50 años, todas las refinerías podrían cerrar, por lo que es necesario evaluar la viabilidad de su mantenimiento a largo plazo.
En cuanto a la situación actual de Pemex, Ramírez indicó que la falta de mantenimiento y la inversión en proyectos como Dos Bocas han contribuido a la degradación de la empresa, sin que se haya logrado recuperar la producción de crudo.