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En entrevista para MVS Noticias con Manuel López San Martín, Gabriel Guerra Castellanos, colaborador de MVS Noticias, habló sobre “La Primera semana de Claudia Sheinbaum”.
Según Guerra, “una semana y dos días que para algunos sienten un suspiro, pero creo que pinta una manera diferente de hacer política, de ejercer el poder público”.
Sheinbaum rompe con la política de López Obrador
Gabriel Guerra reflexionó sobre el contraste entre el estilo de Sheinbaum y el López Obrador. “En el tema de seguridad, lo presentado por Harfuch marca un rompimiento; hay un nuevo enfoque”, destacó.
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A diferencia de otros gobiernos, Sheinbaum ha optado por un diálogo proactivo con gobernadores de oposición, lo que Guerra considera un cambio significativo: “No recuerdo que encargados con Obrador se sentaran a dialogar tan temprano con gobernadores de oposición”.
Estrategia de seguridad de Sheinbaum promete cosas positivas
La administración de Sheinbaum también ha tomado decisiones audaces en materia de seguridad. Guerra mencionó el despliegue de un “gran dispositivo de seguridad” en Culiacán, señalando que la presidenta ha abordado los conflictos de manera directa y con un estilo diferente. “El hecho de ir cuando está el conflicto, lo podemos empatar con la visita a Acapulco en el primer día completo de la presidenta”, comentó.
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Un gobierno abierto al diálogo con Claudia Sheinbaum
El colaborador de MVS Noticias también hizo hincapié en la importancia de la comunicación y la transparencia. “Hoy la presidenta dice que habló con la gobernadora sobre el caso del periodista que corrieron en vivo. Hay un cambio interesante en ese aspecto”, agregó. Esta apertura es un indicativo de que Sheinbaum busca un estilo de gobernanza más inclusivo y menos confrontativo.
Guerra concluyó su análisis con una reflexión personal, citando su lectura de “La Divina Comedia” de Dante: “El último infierno está reservado para los traidores, y no creo que Sheinbaum, Harfuch ni nadie encaje en esa característica”. Esto sugiere que, bajo su liderazgo, se espera un entorno político menos polarizado y más colaborativo.
En resumen, “La Primera semana de Claudia Sheinbaum” no solo ha sido un periodo de transición, sino también un indicativo de un cambio profundo en la manera de hacer política en México.