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En su colaboración para MVS Noticias con Luis Cárdenas, la jefa de información de ese espacio, Diana Alcaraz, compartió las claves para entender la propuesta de prohibir los cigarros electrónicos o vapeadores en México.
Y es que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene previsto presentar antes de que termine el año una iniciativa de ley para regular la venta de estos artículos.
Esta acción surge tras la solicitud del Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Javier Laynez, respaldando el decreto ejecutivo emitido en mayo de 2022 a favor de la salud pública.
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Cofepris alerta: los riesgos mortales de los vapeadores en México
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) declaró en mayo de 2022 una alerta sanitaria máxima por los riesgos que representan para la salud.
La inhalación de sustancias tóxicas, como el acetato de vitamina E, ha llevado al presidente López Obrador a proponer una iniciativa de ley que prohíba la comercialización de estos productos.
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Las sustancias peligrosas ocultas
Un análisis de la Cofepris realizado el año pasado reveló la presencia de sustancias venenosas, como dimetil éter e insecticidas, en estos artículos.
A pesar de estos hallazgos, la comercialización de estos productos sigue sin restricciones, dando lugar a un mercado negro en aumento a través de las redes sociales.
¿Cómo generan dependencia?
La nicotina contenida en estos productos genera una dependencia similar a la de los cigarrillos tradicionales.
A pesar de los riesgos identificados por la Cofepris, el mercado negro de cigarrillos electrónicos ha experimentado un auge, con dealers que ofrecen una variedad a través de plataformas online.
Mientras países como Francia y el Reino Unido promueven el uso de cigarrillos electrónicos como ayuda para dejar de fumar, México se encamina hacia la prohibición total.
Actualmente, 32 países prohíben la venta de los vapeadores, y 79 han adoptado medidas para limitar su uso, incluida la prohibición de la publicidad. La moda del vapeo, a pesar de su aparente popularidad, encierra riesgos considerables para la salud pública.