Un día como hoy, pero de 1949 falleció el pintor muralista mexicano, José Clemente Orozco, considerado uno de los mejores en la historia de nuestro país.
Los expertos en el arte lo ponen como un artista comprometido con las causas sociales, en las que plasmó un realismo ferozmente impresionante.
¿Quién es José Clemente Orozco?
Nació en el siglo XIX en Ciudad Guzmán en Jalisco, un 23 de noviembre de 1883, aunque se mudó cuando se tenía 7 años a la capital mexicana donde comenzó a tomar clases de dibujo en la Academia de Bellas Artes de San Carlos entre 1906 y 1910.
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En 1916, presentó su primera exposición individual en la librería “Biblos” cuando tenía 33 años, pese a que era poco conocido un año después se saltó a la fama con las obras: “Soldaderas”, “Combate” y “El retrato de su madre”.
¿Cuáles son sus obras más destacadas?
El boom de la pintura en México se desató en 1922 y fue cuando al pintor mexicano se le brindó la oportunidad de pintar las paredes del patio grande de la Escuela Nacional Preparatoria del Antiguo Colegio Jesuita de San Ildefonso causando una gran sensación.
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Tres años después pintó una de sus más magníficas obras de nombre “Omnisciencia”, un mural que se encuentra en la Casa de los Azulejos.
“La katharsis”, “Dive bomber”, “El pueblo se acerca a las puertas de la escuela” y “Juárez” son otras grandes pinturas que realizó el mexicano.
Estilo expresionista
Su estilo es de carácter expresionista, conscientemente ligado a las viejas tradiciones artísticas mexicanas, de violento dinamismo y amplísima factura.
En agosto de 1949 concluyó el mural “La gran legislación revolucionaria mexicana”, ubicado en la media cúpula de la Cámara de Diputados de Guadalajara.
El pintor mexicano, José Clemente Orozco murió el 7 de septiembre de 1949 en la capital mexicana, y fue enterrado en la Rotonda de los Hombres Ilustres, honor que, por primera vez en México, se dio a un artista de su categoría.