La temporada de calor ya está aquí, y con ella, las altas temperaturas que pueden afectar nuestra salud y bienestar si no tomamos precauciones. Permanecer en casa no siempre garantiza comodidad si no se aplican estrategias adecuadas para mantener un ambiente fresco y agradable.
Desde la hidratación hasta la ventilación correcta del hogar, hay muchas formas efectivas de hacerle frente al calor sin necesidad de aire acondicionado.
En los últimos años, las olas de calor han aumentado en frecuencia e intensidad. Según informes meteorológicos, algunas zonas del país superan fácilmente los 35?°C durante el día, convirtiendo nuestras casas en verdaderos hornos si no tomamos medidas.
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La temporada de calor no solo representa incomodidad: también puede causar problemas de salud como golpes de calor, deshidratación o fatiga.
Por eso, es fundamental adaptar nuestros hábitos y preparar los espacios en casa para enfrentar esta época sin poner en riesgo nuestro bienestar.
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¿Cómo refrescarse y sobrevivir a la temporada de calor desde casa?
Temporada de calor es sinónimo de prevención. Aquí te presentamos consejos prácticos para mantener tu casa y tu cuerpo frescos durante esta época del año:
- Cierra ventanas y cortinas en las horas más calurosas del día. Evita que el sol entre directamente. Usa cortinas térmicas o de colores claros que reflejen la luz.
- Abre todo por la noche. Deja entrar aire fresco en la madrugada, cuando la temperatura baja.
- Usa ventiladores estratégicamente. Crea corrientes de aire colocando ventiladores en direcciones opuestas. Un truco útil es poner hielo frente al ventilador para enfriar el aire.
- Hidrátate constantemente. Bebe agua aunque no tengas sed y evita bebidas con cafeína o alcohol.
- Evita el uso de electrodomésticos que generen calor. Como el horno o la secadora. Opta por comidas frías y ropa de cama ligera.
- Refresca tu cuerpo. Usa ropa de algodón, mantén una botella de spray con agua fría a mano, y si el calor es muy intenso, date una ducha rápida.
Vivir una temporada de calor intensa no tiene por qué convertirse en una pesadilla. Con algunos ajustes en la rutina y el uso inteligente de los recursos del hogar, es posible mantenerse fresco y cuidar la salud. Además, estas acciones pueden ayudarte a ahorrar energía y contribuir al cuidado del medio ambiente.