Los schnauzer son de los perros más populares en México. Suelen ser cariñosos, tranquilos y muy amigables. Sin embargo, existen ciertas características que debes tomar en cuenta antes de adoptar uno.
Hay tres tipos de estos, dependiendo de su tamaño: los miniatura, estándar y gigante.
A pesar de eso, es más común encontrarse uno de los dos primeros, por lo que nos centraremos en estos.
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¿Qué hay que saber sobre los schanuzer?
De acuerdo con Hill’s Pet, los miniatura suelen ser muy “adaptables” debido a que tienen un aprendizaje rápido.
Respecto a sus medidas, tanto machos como hembras miden unos 30 centímetros con un peso de entre 5 y 10 kilogramos.
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Algo que sin duda los define son sus cejas con mucho pelo, así como un bigote y barba enorme.
En algunos casos, sus orejas son sometidas a cortes para que se mantengan firmes en todo momento. En caso de que no se opte por eso, estarán dobladas.
A pesar de ser de tamaño menor, pueden sacar su furia al encontrarse con otros perros que no conocen, aunque se llevan muy bien con demás ejemplares de su raza.
El paseo es necesario en todo perro, por lo que tendrás que sacarlo al menos dos veces al día.
Aunque tienen gran cantidad de pelo en sus cejas y bigote, en el resto del cuerpo no, por lo que son perfectos para aquellos alérgicos al pelaje.
Su periodo de vida es de los 12 a 14 años.
Pasemos a los estándar. En estos cambia el tamaño, pues los machos miden unos 48 centímetros de altura y tiene un peso de 18 kilos, mientras que las hembras unos 45.7 centímetros y unos 16 kilos, según Purina.
Son un poco más activos que los miniatura y al igual que los anteriores son muy territoriales y guardianes.
Es importante conocer los problemas de salud a los que se pueden enfrentar, los cuales, en su mayoría son cardiacos y displasia de cadera.
Respecto al paseo, basta con una hora al día.
Otra de las actividades esenciales para los schnauzer es el mantenimiento de su pelaje, deberás cepillarlo al menos dos veces a la semana.