Para quienes tienen mascotas saben que los perritos son la felicidad del hogar y nos encanta su compañía en todo momento, sin embargo, se nos pueden presentar situaciones en las que nuestro lomito ocasione que pasemos un mal rato a la hora de la comida.
Nos referimos a ese comportamiento manipulador que tienen cuando estamos disfrutando de nuestros alimentos a cualquier hora del día.
Seguro te ha pasado que tu perrito empieza a llorar o incluso a encimarse en tus piernas por querer probar algo de comida.
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En un principio nos solidarizamos y le damos un pedacito de lo que estemos comiendo, pero con el paso del tiempo, nuestro amigo peludo lo empezará a asociar como algo obligatorio.
Lineamientos para el comportamiento canino
Actualmente se ha comprobado que castigar a los perritos con violencia física o verbal, no solo es incorrecto, sino que empeora la actitud del lomito.
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Hay diversas formas de generar un determinado comportamiento positivo en nuestro perro, uno de ellos es el condicionamiento operante.
El condicionamiento operante en los perros es un método de aprendizaje mediante el cual el perro es capaz de modificar la frecuencia de una determinada conducta mediante el uso de premios o castigos.
¿Recuerdas el condicionamiento clásico de Pavlov?
Bueno, lo que puedes hacer para que tu perro no esté de encimoso cuando estés comiendo, es sincronizar la hora de tu comida con la de él.
Ellos reconocen perfectamente el sonido de las croquetas cuando caen a su traste; intenta dejarle su comida servida cuando tú estés a punto de comer también.
Puede que en las primeras ocasiones siga optando por irse contigo a la mesa, pero si pones un horario claro para su comida, no tendrá de otra mas que irse a comer a su lugar, porque sabrá que después no le darás más alimento.