El avance acelerado de la inteligencia artificial (IA) ha abierto la puerta a todo tipo de innovaciones, pero también ha facilitado la aparición de fraudes cada vez más sofisticados. Entre ellos destacan las deepfakes, contenidos manipulados digitalmente que pueden mostrar a personas ficticias. Conoce cómo puedes evitarlo.
Expertos en ciberseguridad advierten que este fenómeno se ha expandido con rapidez y hoy representa uno de los mayores desafíos para la seguridad digital global.
¿Qué es la creación de deepfakes?
Según especialistas, las deepfakes no solo se utilizan para engañar a usuarios desprevenidos con ofertas fraudulentas, sino también para difundir noticias falsas, manipular opiniones públicas y vulnerar la privacidad de figuras públicas y ciudadanos comunes. Ante este escenario, recomiendan que los usuarios desarrollen habilidades básicas para detectar material audiovisual manipulado.
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Señales que delatan un contenido generado con IA
El Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE) señala que uno de los primeros indicadores suele encontrarse en el contexto del contenido: titulares alarmistas, mensajes que apelan a las emociones o videos que buscan generar urgencia suelen esconder intenciones fraudulentas.
En el plano visual, los especialistas recomiendan observar con detenimiento detalles como sombras mal colocadas, iluminación artificial, fondos deformados o desproporcionados, e incluso objetos que parecen fuera de lugar. En rostros o cuerpos, errores como desenfoques, gestos rígidos o movimientos poco naturales pueden ser evidencia de una manipulación digital.
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¿Cómo crean identidades falsas los estafadores?
De acuerdo con expertos, los estafadores suelen usar bases de datos filtradas y redes sociales para recopilar información real con la que construyen identidades falsas altamente convincentes.
Después, prueban diversas versiones de mensajes y combinan canales como SMS, correos electrónicos y redes sociales para reforzar la apariencia de legitimidad.
Otra táctica común es la creación de páginas web falsas que imitan el diseño de portales oficiales, lo que aumenta la probabilidad de engañar a los usuarios.
En un mundo cada vez más digitalizado, el conocimiento y herramientas tecnológicas es esencial para enfrentar los riesgos de una era donde la IA puede crear realidades completamente falsas, como los Deepfakes.
