La Real Academia Española (RAE) reveló que hay un error que ha sido adoptado por años en el idioma español y que podría poner fin al "huevo frito".
La academia explicó que los participios son formas verbales que cumplen con las funciones tanto de verbo como de adjetivo.
La utilización correcta de estas palabras puede ser la diferencia entre la claridad y la precisión de la comunicación que tenemos con nuestro interlocutor.
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¿La RAE aclara si es correcto o no escribir 'huevo frito'?
La organización señala que en el español contemporáneo, hay ciertos verbos que presentan dos formas de participio, que son regular e irregular.
Ejemplos de estas palabras son: imprimir (imprimido/impreso), freír (freído/frito) y proveer (proveído/provisto), con sus respectivos derivados.
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Los participios pueden utilizarse de manera indistinta en la formación de los tiempos compuestos y de la pasiva perifrástica, aunque la preferencia por alguna de las formas varíe en cada caso.
La RAE señala que no se debe asimilar el caso de estos participios verbales irregulares con el nutrido grupo de adjetivos procedentes de participios latinos.
Estos últimos con casos como: abstracto (del latín abstractus, participio de abstrahere), atento (del lat. attentus, part. de attendere), confuso (del lat. confusus, part. de confundere), correcto (del lat. correctus, part. de corrigere), contracto (del lat. contractus, part. de contrahere), tinto (del lat. tinctus, part. de tingere), etc.
Añade que algunas formas pueden haber funcionado como participios verbales en épocas pasadas del idioma, pero actualmente sólo funcionan como adjetivos.
De esta manera es que se da la confusión con el verbo "freír", el cual da lugar a las formas del participio "frito" y "freído". En este caso, "frito" es la opción más común y se utiliza preferentemente en el habla cotidiana.
Al respecto se señala que hay construcciones como "he frito las papas" o "las papas están fritas"; por otra parte, una construcción menos frecuente, pero aceptada por la academia, es "tiene los huevos freídos".
La academia apunta que tanto el uso de la forma regular e irregular son correctas; sin embargo, su consejo es que se empleen las formas irregulares en situaciones más formales o como adjetivos.
Es así que la RAE aclara que lo importante es adaptarse al contexto, y que en un principio "frito" era utilizado como participio irregular, pero con el desarrollo del lenguaje, pasó a ser un adjetivo permitido por la academia, por lo que es válida la construcción de "huevo frito".