“Pollo Feliz” es uno de los restaurantes de pollos al carbón más destacada de México, que, al igual que “El Pollo Loco”, ha logrado ser el referente en este ramo en una cadena de comida.
Poco se sabe de su historia y fundador, pues prácticamente fue en un parpadeo cuando en el país resaltaron los establecimientos con colores, rojo, amarillo y un pollito sonriendo.
Historia del Pollo Feliz
Otro de los pioneros de los pollos asados en México es Arnoldo de la Rocha y Navarrete, quien gracias a su visión pudo notar que este alimento se convertiría en el favorito de muchos.
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Con el tiempo, descubrió su pasión por el negocio y, junto con sus socios, reunió los locales de la familia bajo la marca Pollo Feliz, la cual se volvería una exitosa cadena de restaurantes en México y el sur de Estados Unidos.
Es originario de Chihuahua, en el corazón de la Sierra Tarahumara del rancho de Zarupa, donde tuvo que dejar el campo para ir a la ciudad en busca de más oportunidades.
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En Sinaloa tomó un curso de cómo asar pollos y obtuvo su título de pollero; después se fue a Chihuahua nuevamente en busca de un local para poder empezar a venderlos.
También es Operador de Alimentos del Norte; socio fundador de Alimentaria Mexicana y socio fundador de ENPASA.
El sueño mexicano
Ha escrito 5 libros, incluido “El sueño mexicano”, en el que narra su historia desde la sierra de Chihuahua hasta fundar y dirigir con éxito 5 empresas de alto impacto.
Pollo Feliz, la cadena de pollos al carbón más grande de México, tiene mil 500 sucursales en México y Estados Unidos, donde Arnoldo de la Rocha continúa con su legado, difusión de emprendimiento y ayuda humanista para diversas fundaciones.