OPINIÓN HÉCTOR ZAGAL

El domingo más triste del año

"Mañana habrá mucho tráfico en la Ciudad de México, porque inicia el regreso a clases", escribe Héctor Zagal.

Héctor Zagal explica sobre por qué hoy es el domingo más triste del año de cara al inicio del regreso a clases.
Héctor Zagal explica sobre por qué hoy es el domingo más triste del año de cara al inicio del regreso a clases.Créditos: Cuartoscuro
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Mañana habrá mucho tráfico en la Ciudad de México, porque inicia el regreso a clases. Para muchos niños, y para mí en su momento, la tarde de este domingo era la más triste del año. Nunca fui mal estudiante; sin embargo, en la primaria aborrecía el retorno a la escuela. La preparatoria fue distinta; ahí me divertí y encontré a mis grandes amigos de vida.

Días antes había que ir al centro a comprar lápices, plumas, reglas, compases y cuadernos, porque resultaban más baratos. En la primaria pedían libros de inglés, que era carísimos. Por fortuna, no había que comprar libros de español, usábamos los de la SEP que, dicho sea de paso, llegaban con retraso de quince días.

El fin de semana previo al trágico regreso a clases, mis padres pasaban horas forrando cuadernos. El uniforme era horrible: suéter verde y pantalón gris. Para aligerar el inicio, solían regalarnos una lonchera, un estuche o una mochila. Pequeños consuelos para el cadalso del lunes. 

La escuela estaba a veinticinco minutos a pie de mi casa. No había transporte público que nos dejara cerca; lo más práctico era caminar con mochilas a cuestas. Mi madre se llevaba la peor parte. En días de lluvia, tomábamos taxi; pero era excepción. Mis padres ya bastante tenían con los gastos de inscripción, colegiatura y uniformes.

De lunch, mi madre me ponía un sándwich y agua de limón. Una vez a la semana me daban un peso, suficiente para un Gansito en el recreo. Lo que más me angustiaba era el maestro que me tocaría ese año. Ya les he contado de la famosa Miss Elda. Pegaba con un lápiz en la mano y le dijo a mi mamá que, como yo tenía mala letra, no llegaría ni a la secundaria. Sin comentarios.

En esos años los profesores podían hacer bullying. Yo lo padecí en kínder y otra vez en la primaria, con la susodicha Miss Elda. Los tiempos cambiaron. Ahora son los alumnos quienes intimidan a los maestros. Esta noche, más de un profesor dará vueltas y vueltas en la cama, preguntándose qué alumnos encontrará mañana en su salón.

Y ustedes, ¿qué recuerdos conservan del inicio de clase?

(Héctor Zagal, profesor de la Facultad de Filosofía de la Universidad Panamericana, conduce el programa de radio “El Banquete del Dr. Zagal” los miércoles a las 21:00 y los sábados a las 17:00)