Las estampas de impunidad y terror se repiten a lo largo y ancho del país; las carreteras se han convertido en trampas mortales para los usuarios. El robo de vehículos, narcorretenes, toma de casetas y bloqueos, exhiben la inseguridad de quienes circulan por las autopistas o vías locales.
Impera la ley de la selva, los canales para amortiguar el hartazgo social no funcionan, campesinos, transportistas, maestros y diversas organizaciones que se escudan en algunas causas fachada, como la sindical, presos políticos, normalistas o estudiantes, bloquean vías de comunicación, secuestran camiones o toman casetas y nada pasa. El gobierno está superado y el Estado de derecho atropellado.
Testimonios de conductores, confirman que hay carreteras donde la operación de grupos criminales y la falta de vigilancia de las autoridades las han convertido en verdaderos infiernos. Lo que más se roban son: Abarrotes, Electrónicos, llantas, equipos de cómputo, rines, telas, varillas, cemento, vinos, electrodomésticos y pipas con combustibles. Algunos choferes dicen que en las aduanas se filtra la información de lo que llevan y salen marcados para ser asaltados.
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Transportar mercancía por carretera en México es un trabajo de alto riesgo, de acuerdo con una investigación de Bloomberg Businessweek México, un intento de robo en carreteras nacionales ocurre cada 50 minutos. Además, debido a la inseguridad se observa un incremento en los costos de seguros de 20 por ciento, lo que afecta a las empresas de transporte.
La Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), estima que hay alrededor de 90,000 camiones pesados inoperativos debido a la falta de conductores. Se requieren al menos 56 mil para cubrir la demanda. Sin embargo, ya nadie quiere trabajar como operador de autotransporte de carga, pese a que los salarios en el sector son de 35 mil pesos mensuales hasta los 50 mil pesos.
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Cómo estarán las cosas que el Consejo Nacional de Comercio Exterior (NFTC en inglés), que agrupa a 300 grandes empresas -incluyendo a UPS, Coca Cola y Hewlett Packard-, pidió al gobierno de Trump abordar esta problemática durante la revisión del T-MEC, que se realizará en 2026.
"Los riesgos se extienden mucho más allá de la frontera y se traduce en costos significativos, riesgos de seguridad para los transportistas, interrupciones en la cadena de suministro y riesgos de inversión para México", destacó la agrupación.
Diversos analistas, estiman las pérdidas económicas por el robo de mercancías arriba de los 7 mil millones de pesos. La Concanaco ha señalado que la inseguridad en las carreteras representa un costo total de hasta el 2% del PIB nacional, afectando la competitividad y la inversión.
Campesinos y transportistas, mexicanos, también, protestan desde hace días, por esta crisis de inseguridad. Baltazar Valdez, líder del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano (FNRCM), afirma que la inseguridad en las carreteras está fuera de control, pues la extorsión está imparable, no sólo por el crimen organizado, sino por policías federales estatales y municipales que los extorsionan en el camino con cualquier pretexto.
La Asociación Nacional de Transportistas (ANTAC) denunció públicamente la falta de atención de la Secretaría de Gobernación, a través de un comunicado advirtió: “Quisiéramos no tener la necesidad de exigir algo a lo que tenemos derecho: que no nos roben, que no nos extorsionen y que no nos maten o desaparezcan”.
La ANTAC denunció: “Cada día entre 35 y 40 transportistas somos víctimas de un delito, si tenemos suerte acabamos tirados en medio de la nada y si no, no volvemos nunca más a casa”. La exigencia es: “cero robos, cero extorsiones y cero muerte”
Las entidades donde los robos tienen mayor incidencia son: el Estado de México, Puebla, Guanajuato, Jalisco, San Luis Potosí, Michoacán, Querétaro, Hidalgo, Veracruz y Tlaxcala.
Sin duda, el gobierno está ante un desafío que exige, algo más que diálogo, cuerpos policiacos y militares en la red carretera del país. No hay que perder de vista que el robo a transportistas impacta a todos los involucrados en la cadena productiva y de consumo; las pérdidas, pagos de primas de los seguros, retrasos en la entrega de los artículos, las termina pagando el consumidor al adquirir cualquier producto.
Así las cosas, estamos ante una bomba de tiempo, la violencia e inseguridad en las carreteras afecta a todos los usuarios, rebasó los límites y desafía al Estado de Derecho.
Vericuentos
Democracia y juventud
Si bien el empleo, la economía, la inseguridad y la vivienda, son las principales preocupaciones de las juventudes mexicanas, “el 70% de dos mil mexicanos entre 15 y 35 años consultados por la Fundación Friedrich Ebert, manifestaron que “la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno” y consideraron que “el voto es un recurso valioso; la democracia es una oportunidad de exigir cambios y decidir el rumbo del país”. Mariana Licea, Luis Martín Sosa y Elisa Gómez creadores del estudio “Juventudes y política en México: gravitando entre la información y la participación política” revelaron que generación registra una baja en su interés por la lectura y apuesta por las redes sociales “para informarse, comunicarse y dialogar”. El 62 % de los jóvenes que participaron en el estudio dijo que obtiene la información política principalmente de plataformas como Facebook, Twitter y YouTube. ¡Política Online!
@guillegomora