¿Cómo fue la Edad Media? Hablamos de una época que duró alrededor de diez siglos. Los inicios de la edad media son muy diferentes de su final. Los renacentistas y los ilustrados tenían una mala imagen del medievo: oscuridad, superstición, mal gusto, despotismo. Durante el romanticismo, en cambio, los escritores y artistas idealizaron el medievo: magia, misticismo, amor, fidelidad.
Para los baby boomers y las generaciones posteriores, la Edad Media procede, en muy buena medida, de Disney. Sus equipos creativos han seguido reinterpretando el mundo medieval y hoy tenemos princesas heroicas que salvan el día. (Lo cual, dicho sea de paso, nos parece un gran acierto, porque contribuye a romper los estereotipos que muchos aprendimos de niños: el varón que salva a la mujer frágil). La Edad Media es un tema atractivo.
Muchos de los cuentos de Disney están basados en los relatos coleccionados por los hermanos Grimm en sus libros. Muchos de estos relatos provienen desde tiempos medievales. “El ahijado de la muerte”, uno de los cuentos que los hermanos Grimm recogen, cuenta con una trama muy parecida a un cuento con el que muchos mexicanos estamos familiarizados: “Macario”. Todo tiene sentido cuando nos damos cuenta de que B. Traven, autor del cuento, nació y creció por la región de Alemania antes de viajar a México.
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Los castillos hermosos también son otra influencia de las películas del ratón. Sí había castillos en la Edad Media, pero poco tenían que ver con los estéticos palacios que nos presentan sus películas. Los castillos reales eran fortalezas diseñadas para resistir asedios. La higiene allá dentro era deplorable y las comodidades eran pocas. La mayoría de nosotros gozamos de más comodidades en nuestra habitación, por modesta que sea, que un señor feudal en la suya.
El famoso castillo que todos vemos en el logo de Disney está inspirado en el Palacio-Castillo de Neuschwanstein, situado en Alemania. Antes de que existiera esta construcción, es cierto que había un castillo medieval, aunque en ruinas. Fue en 1839, muchos después de la Edad Media, cuando el rey Luis II de Baviera decidió transformar las ruinas del castillo en una residencia real.
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Los caballeros románticos que salvan a la princesa tienen también mucho de cuento. Un verdadero caballero del medievo obedecía al señor de quien era vasallo, que podía ser un duque, un marqués, a veces un rey.
¿Quieren conocer más sobre los caballeros medievales? Les recomendamos la lectura del “Cantar del Mío Cid”, aunque ahí no hay dragones ni magos, sino intrigas políticas, violencia contra la mujer y batallas contra los moros, y por supuesto, la lectura de el “Libro de orden de caballería” de Ramón Lull.
¿Quieren reírse la caballería? Nada como el Quijote de la Mancha, que es la historia de un hombre loco que intenta poner el práctica unos ideales (que rara vez se vivieron) fuera de tiempo y que, al hacerlo, provoca todo tipo de destrozos.
Sapere aude! ¡Atrévete a saber!
@hzagal
(Héctor Zagal y Óscar Sakaguchi, coautores de este artículo, son conductores del programa “El Banquete del Dr. Zagal en MVS 102.5 todos los miércoles a las 22:00 y los sábados a las 17:00)