Cada año, durante la canícula, el estado de Nuevo León enfrenta una de las etapas más calurosas del verano.
Aunque actualmente se han registrado lluvias y temperaturas moderadas, la historia climática de Monterrey revela picos de calor extremos que han llegado a superar los 46 grados Celsius.
¿Cuándo ha sido el calor más agobiante en Monterrey?
La temperatura más alta registrada en la capital del estado ocurrió el 22 de junio de 1994, cuando los termómetros marcaron 46.1 °C, un récord que hasta la fecha sigue vigente.
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Otros episodios de calor extremo fueron el 10 de julio de 2011, con 45 °C, y el 1 de junio de 2004, cuando se alcanzaron 44.4 °C.
Estas cifras no sorprenden si se toma en cuenta que Nuevo León se encuentra en una zona de clima semidesértico, con poca vegetación y un relieve que favorece la acumulación de calor. Durante la canícula —periodo más caluroso del verano que suele iniciar en la segunda mitad de julio— es común que las temperaturas oscilen entre los 30 y 40 grados, aunque en años extremos pueden rebasar esa cifra.
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Recomendaciones para sobrevivir a las altas temperaturas
La Secretaría de Salud y Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones para la población:
- Mantenerse bien hidratado.
- Evitar la exposición al sol entre las 11:00 y 17:00 horas.
- Usar ropa ligera y de colores claros.
- Permanecer en lugares frescos o con ventilación.
- Prestar especial atención a niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
- Detectar signos de golpe de calor como mareos, piel caliente, debilidad o desmayo.
Afortunadamente, en los últimos días el clima en Monterrey ha presentado chusbascos aislados y temperaturas más agradables, lo que ha ayudado a mitigar los efectos del calor. Sin embargo, se recomienda continuar monitoreando el pronóstico del clima ante posibles cambios bruscos.
