Un oso negro fue captado mientras deambulaba por las instalaciones de un hotel en el municipio de Santiago, Nuevo León, generando sorpresa entre los presentes y movilizando a las autoridades de conservación y emergencia.
El ejemplar fue descrito como un macho adulto de 99 kilogramos, perteneciente a la especie de oso negro americano (ursus americanus). Se encontraba en buen estado físico y fue detectado en áreas públicas del establecimiento.
Ante el riesgo para los huéspedes y el propio animal, personal especializado de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León, en coordinación con la Guardia Forestal y Protección Civil Estatal, aplicaron una contención química para garantizar una intervención segura.
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Una vez anestesiado, el oso fue evaluado por veterinarios, quienes confirmaron que no presentaba heridas ni lesiones visibles. Durante el procedimiento, se le colocó un collar con rastreo satelital para monitorear sus recorridos y saber qué tanto acostumbra a bajar en zonas urbanas.
También, se le realizaron estudios biológicos como análisis de sangre y toma de muestras. Tras confirmar su buen estado, el ejemplar fue liberado en una zona alejada de la población para facilitar su readaptación al hábitat natural.
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