Este miércoles, el fiscal general de Nuevo León, Javier Flores Saldívar, se pronunció sobre los recientes hechos violentos donde se han involucrado familias, en particular la ejecución de una madre y su bebé en Juárez, así como el asesinato de una familia en Guadalupe.
En entrevista tras la reunión de seguridad, el funcionario lamentó lo que calificó como “imprudencias” del crimen organizado y confirmó que ambos casos podrían estar relacionados con actividades del narcotráfico.
"Las ejecuciones que han existido yo creo que son hasta imprudencias. En el caso del bebé, por ejemplo, yo creo que ni la esposa ni el bebé tenían alguna responsabilidad en eso, probablemente relacionados con el narco", reconoció el titular de la Fiscalía de Justicia en Nuevo León.
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El primer caso ocurrió la noche del fin de semana en la colonia Los Puertos, en el municipio de Juárez, donde Nataly Rangel, de 26 años, y su hijo de apenas cuatro meses, Aarón Asael, murieron tras ser atacados a balazos cuando llegaban a su domicilio en un taxi conducido por Julio Javier Melo, pareja de Rangel.
En relación a este hecho, hoy jueves las autoridades localizaron el cuerpo de un hombre ejecutado junto a una manta con un mensaje presuntamente firmado por un grupo delictivo. Javier Flores indicó que este hallazgo podría estar vinculado con el ataque a la familia en Juárez.
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El otro caso de ataque a familias ocurrió este jueves, dejando tres muertos en un domicilio de la colonia Benito Juárez, conocida como “El Pozo”, en el municipio de Guadalupe.
Las víctimas fueron identificadas como José Alfredo Lara, de 50 años; su esposa Mónica Verónica Sánchez, de 40; y su hijo Francisco, de 16 años.