Ternium enfrenta investigaciones y posibles sanciones luego de un derrame de sustancias tóxicas en el arroyo La Talaverna, en el municipio de San Nicolás, situación que podría derivar incluso en su reubicación.
El incidente ocurrió el pasado 17 de abril en su planta Churubusco, cuando se detectaron daños en tanques de almacenamiento de cloruro férrico, provocando el desbordamiento de químicos hacia el cauce pluvial. La coloración rojiza del agua, reportada por vecinos y difundida en redes sociales, generó alarma en la comunidad.
Tras el derrame, la Procuraduría Estatal de Medio Ambiente de Nuevo León realizó una inspección en las instalaciones de Ternium, verificando la gravedad de la contaminación.
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Como medida inmediata, las autoridades ordenaron la limpieza y remediación urgente del arroyo para evitar daños mayores al medio ambiente y a la salud pública.
Aunque Ternium desplegó más de 150 brigadistas para realizar trabajos de limpieza, la nueva inspección realizada el 26 de abril evidenció que aún había material contaminante en el cauce.
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Según reportes de la empresa, las acciones incluyen la aplicación de materiales neutralizantes, el uso de equipos de succión sólidos y la toma diaria de muestras de agua para monitorear el pH.
Por su parte, Alfonso Martínez, Secretario de Medio Ambiente del estado, confirmó que la investigación administrativa está por concluir esta semana. Dependiendo de los resultados, la empresa podría enfrentar sanciones ejemplares e incluso ser reubicada, como lo han solicitado autoridades municipales y diputados locales.
Ternium asegura que mantiene su compromiso ambiental y que continuará las labores de remediación hasta eliminar por completo cualquier riesgo. Mientras tanto, la Secretaría de Medio Ambiente anunció que seguirá realizando inspecciones permanentes para garantizar la protección ambiental en la zona metropolitana de Monterrey.