GASTRONOMÍA

El Manolín: 87 años de tradición y sabor en Monterrey

Un restaurante que ha compartido momentos agradables con muchas generaciones y que ahora cuenta con tres sucursales.

El Manolín cuenta con tres sucursales, siendo la más emblemática en Calzada Madero.
El Manolín cuenta con tres sucursales, siendo la más emblemática en Calzada Madero.Créditos: Facebook El Manolín / Canva
Escrito en NUEVO LEÓN el

En una ciudad en constante evolución, hay lugares que resisten el paso del tiempo, convirtiéndose en parte de la historia y la identidad de sus habitantes. El Manolín, con más de 87 años de tradición, es uno de esos rincones donde los regiomontanos han encontrado, generación tras generación, el sabor auténtico de la cocina casera.

Desde su fundación, El Manolín ha sido punto de encuentro para familias, amigos y trabajadores que buscan un desayuno reconfortante o una comida que los haga sentir en casa. Sus migas con huevo a la mexicana, huevos rancheros, enchiladas suizas y el tradicional caldo de camarón se han convertido en favoritos de muchos, creando recuerdos que trascienden generaciones.

Más que un restaurante, es un pedazo de la historia de Monterrey. Los sabores, el aroma del café recién hecho y la calidez en el servicio evocan esos tiempos en los que la ciudad era más tranquila y la comida se disfrutaba sin prisas.

Tres sucursales, la misma esencia

El Manolín ha sabido mantenerse vigente sin perder su esencia. Actualmente, cuenta con tres sucursales donde sigue ofreciendo el mismo sabor que lo ha hecho famoso:

?? Sucursal Centro – La más icónica, en Av. Francisco I. Madero #1975.
?? Sucursal Purísima – En Padre Mier Ote #653, local #302, nivel 3.
?? Sucursal Valle – En Río Mississippi #116, Col. del Valle.

A pesar de los cambios en la ciudad, El Manolín sigue siendo un refugio para quienes buscan reencontrarse con esos sabores que evocan el Monterrey de antaño. Es un recordatorio de que, aunque el tiempo pase, hay cosas que nunca deberían cambiar.

¿Recuerdas tu primera visita a El Manolín? Quizás fue un desayuno en familia, una comida después del trabajo o un café con un viejo amigo. Lo que es seguro es que este restaurante ha formado parte de la historia de muchos.