La influencer regiomontana Alana Flores vivió un momento incómodo durante una transmisión en vivo desde un gimnasio, donde fue reportada por grabar mientras realizaba su rutina de pierna.
La creadora de contenido compartía su entrenamiento con sus seguidores cuando una persona del establecimiento se acercó para pedirle que dejara de grabar a las demás personas presentes.
En el video, que rápidamente se viralizó en redes sociales, se escucha el momento en que el trabajador del gimnasio le solicita a Alana que tenga más cuidado con las tomas, explicándole que no está permitido grabar a otros usuarios sin su consentimiento.
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La influencer respondió con cortesía, asegurando que su intención no era grabar a nadie más, sino únicamente su rutina, aunque aceptó que seguiría las indicaciones.
A pesar de continuar con la transmisión, sus seguidores notaron que Alana se mostró visiblemente incómoda y que su actitud cambió después del incidente.
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Minutos más tarde, la influencer expresó su molestia diciendo que “por eso le cagan los gimnasios”, comentario que desató debate entre sus fans y usuarios en redes, quienes opinaron tanto a favor como en contra de la política del establecimiento.
El clip se volvió tendencia en TikTok y X (antes Twitter), donde varios internautas destacaron la importancia de respetar la privacidad de los demás en espacios públicos, mientras otros defendieron a la influencer argumentando que solo estaba haciendo su trabajo como creadora de contenido.