NUEVO LEON

Alfredo Ballí: quién era el monstruo de la Talleres en Monterrey

Alfredo Ballí Treviño, un hombre que parecía ser un miembro respetable de la sociedad regiomontana, cometió un crimen atroz que lo llevaría a ser conocido en la historia como el verdadero inspirador de Hannibal Lecter.

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Alfredo Ballí Treviño fue un médico de Monterrey que cometió una serie de asesinatos en la década de 1950 e inspiró al famoso personaje de Hannibal Lecter, el caníbal de la novela "El silencio de los inocentes" de Thomas Harris.

Pero ¿cuál es la historia detrás del temido personaje? Ballí era un profesional reconocido en Monterrey, era un joven doctor, casado, que tenía su consultorio en la colonia Talleres. 

Era conocido por su atención a las personas de bajos recursos. Sin embargo, detrás de su fachada de médico humanitario se escondía un oscuro secreto: la sombra de un asesino.

El crimen que marcó su historia 

Esta vida tranquila y de aparente buena reputación tomaría un giro de 180 grados por momento de desesperación. 

Todo ocurrió el 8 de octubre de 1959, cuando, a la edad de 28 años, Alfredo Ballí tuvo una discusión con otro hombre llamado Jesús Castillo Rangel, un joven de 20 años con quien presuntamente mantenía una relación sentimental.

De acuerdo con las notas periodísticas e indagatorias de esa época, el doctor Ballí le aplicó pentotal sódico, (un sedante) y posteriormente lo desangró y lo descuartizó, para luego llevar a sepultar sus restos en un terreno en el municipio de Guadalupe.

El médico llevó los restos de su enamorado en una caja de cartón que transportó en la cajuela del coche y fue hasta el rancho La Noria, donde ahora es el Puente Chapultepec.

El crimen se registró en su propio consultorio ubicado en la calle artículo 123 de la colonia Talleres.

Pero el médico no ocultó bien sus rastros, pues el crimen fue descubierto y lo declararon culpable; la sentencia que recibió por el crimen fue pena de muerte y fue la última vez que se aplicó en el país.

El vínculo con Hannibal Lecter

Thomas Harris, el autor de "El silencio de los inocentes", se inspiró en el caso de Alfredo Ballí Treviño para crear al personaje de Hannibal Lecter. La inteligencia, el conocimiento médico y la perversidad de Ballí sirvieron como base para construir uno de los villanos más icónicos de la literatura y el cine.