Aunque este verano ha sido caluroso para los habitantes de Nuevo León, las temperaturas no han alcanzado los extremos habituales de otros años, lo que ha llevado a muchos a preguntarse si realmente estamos viviendo la tradicional canícula.
Un experto de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) explicó las razones detrás de este fenómeno inusual, señalando que sí estamos en periodo de canícula, pero con características atípicas que han hecho el calor más soportable.
¿Por qué hace menos calor?
El Dr. Carlos Ramírez, de la Secretaría de Sustentabilidad de la UANL, explicó que la presencia del fenómeno meteorológico conocido como La Niña ha influido en la disminución de la intensidad del calor en la región.
Te podría interesar
La Niña, que sigue al fenómeno de El Niño, trae consigo mayor humedad, lluvias y días nublados, lo que ha generado una sensación térmica menos agobiante en Monterrey y sus alrededores.
"Actualmente estamos viviendo una canícula muy fresca, hay menos calor y más humedad, y pensamos que no hay canícula, pero eso nos confunde un poco. Sí hay canícula", señaló el experto.
Te podría interesar
Ramírez subrayó que este fenómeno no solo está afectando las temperaturas, sino también el paisaje natural del estado. La abundancia de lluvias ha permitido que la vegetación en Nuevo León, particularmente en las áreas montañosas, se mantenga verde y saludable, lo que contribuye a atenuar la radiación solar y, por ende, a moderar las temperaturas.
El meteorólogo recordó que, aunque las temperaturas en Monterrey han superado los 35° centígrados durante esta semana, no se comparan con los registros de años anteriores, cuando la canícula generaba temperaturas por encima de los 40° centígrados. Esta diferencia se debe en gran medida a la influencia de La Niña y a la capacidad de la vegetación para absorber parte del calor.
"Aunque estemos en un año en el que globalmente se están registrando temperaturas muy altas, en Monterrey no hemos experimentado ese calor extremo. Esto se debe a que la humedad y la vegetación han jugado un papel crucial en la moderación del clima", explicó Ramírez.