Las presas de Nuevo León han experimentado cambio significativo con la temporada de lluvias, pasando de niveles críticos de almacenamiento a alcanzar un récord de llenado cercano al 90 por ciento de su capacidad total en tan solo un mes.
Esto a pesar de que la Conagua ha realizado desfogues a los embalses en distintas ocasiones para prevenir desbordamientos o afectaciones en comunidades aledañas.
Y es que la temporada de huracanes de 2024 ha traído un acumulado de precipitación mayor a otros años, con el paso de la tormenta tropical “Alberto” y los remanentes del Huracán “Beryl”.
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Muestra de ello, es que en conjunto las presas de La Boca, Cerro Prieto y El Cuchillo suman mil 298.987 milímetros cúbicos de almacenamiento, de un total de mil 458 milímetros cúbicos, esto es un 89 por ciento, de acuerdo con datos de la Conagua.
La presa Cerro Prieto, ubicada en el municipio de Linares, registró una capacidad de 98 por ciento, algo que no pasaba desde hace nueve años.
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Este embalse llegó a niveles críticos apenas en el mes de junio, cuando registró un 4.9 por ciento de su capacidad con solo 14.8 hectómetros cúbicos de agua.
Este incremento se debe en parte a que desde hace 24 días no se han realizado extracciones de agua de la presa, debido a trabajos de reparación en la Planta de Bombeo Número Dos, que sufrió una inundación reciente.
En el caso de la presa La Boca, en Santiago, actualmente se encuentra en un 93 por ciento, debido a los desfogues, pues ha llegado al 100 por ciento en días pasados. Esto también es algo que no ocurría desde hace prácticamente cuatro años.
Finalmente, la presa El Cuchillo, en Nuevo León, se encuentra en un 86.54 por ciento, un nivel comparable al de hace tres años, en enero de 2021.
Estos incrementos reflejan una mejora significativa para los embalses, luego de que hace apenas unos meses presentaran niveles críticos.