Las principales presas de Nuevo León han alcanzado niveles superiores al 100 por ciento de su capacidad debido a las intensas lluvias registradas en la región durante las últimas semanas.
Según el último reporte emitido por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Oficina de Control y Regulación de Embalses (OCRB) a las 6:00 horas de este 25 de octubre, las presas La Boca, Cerro Prieto y El Cuchillo se encuentran al máximo de su capacidad, lo que representa una importante recuperación en sus niveles de almacenamiento de agua, aunque también plantea desafíos de gestión ante el riesgo de desbordamiento.
Niveles actuales de las presas en Nuevo León
Los datos de CONAGUA muestran que cada una de las presas en la entidad ha rebasado el 100% de su capacidad de almacenamiento. Los niveles específicos reportados son los siguientes:
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Presa La Boca: con un 100.25 por ciento de su capacidad, almacena actualmente 38 mil 655 millones de metros cúbicos (Mm³).
Presa Cerro Prieto: la más alta en porcentaje, alcanzando un 113.65 por ciento con un volumen de almacenamiento de 340 mil 938 Mm³.
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Presa El Cuchillo: se encuentra al 102.40 por ciento, con una capacidad de almacenamiento de un millón 150 mil 098 Mm³, consolidándose como la más grande en términos de volumen almacenado.
Este incremento en los niveles es una buena noticia para la región, ya que estas presas son fuentes primordiales de abastecimiento de agua para la Zona Metropolitana de Monterrey. La recuperación de estos embalses llega después de un periodo crítico de sequía que afectó a la entidad y obligó a implementar restricciones en el suministro de agua durante varios meses.
Recomendaciones a la población
La Secretaría de Protección Civil del estado ha recordado a los habitantes de áreas aledañas a estas presas tomar precauciones y estar atentos a los informes meteorológicos, así como a los comunicados de las autoridades.
El almacenamiento al máximo en las presas de Nuevo León supone una condición favorable para el abastecimiento de agua en el futuro próximo, aunque la población debe estar consciente de las posibles medidas de control, como el desfogue preventivo de agua.
El constante monitoreo de los niveles de las presas y la comunicación con las comunidades es fundamental para evitar incidentes. A medida que se acerca la temporada invernal, las autoridades esperan que los niveles se mantengan estables, pero reiteran la importancia de la gestión de los embalses y las medidas adecuadas para garantizar el suministro sin comprometer la seguridad de las zonas aledañas.
El llamado es a la calma y a la cooperación de la ciudadanía, ya que el estado ha implementado sistemas de monitoreo avanzados y cuenta con un plan de acción en caso de cualquier eventualidad.