En el imaginario popular de México, hay un estereotipo que ha capturado la atención de muchos y ha perdurado por generaciones: la creencia de que los regios se casan con sus primos. Pero, ¿qué hay detrás de esta afirmación? ¿Es realmente una práctica común o simplemente un rumor? Aquí te contamos.
En internet es usual encontrar memes acerca de este mito que alimentan la idea de que en Monterrey, la endogamia es común. Estas afirmaciones suelen provenir de personas de otros estados en un tono de broma.
Esta creencia ha tomado tanta fuerza que incluso el ex gobernador Jaime Rodríguez Calderón publicó el pasado 20 de septiembre de 2021 en su cuenta oficial de Facebook un meme de los Simpson que hace referencia al matrimonio entre primos.
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¿Qué es la endogamia?
El diccionario de la Real Academia Española (RAE), define a la endogamia como "la práctica de contraer matrimonio entre personas de ascendencia común, naturales de una misma localidad o comarca, o de un grupo social".
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¿Por qué se dice que en Nuevo León se casan entre primos?
Una de las teorías sobre este estereotipo sugiere que todo comenzó con la fundación de Monterrey, pues cabe recordar que en ese momento había solo 12 familias fundadoras de origen judíos sefardíes, que seguían manteniendo costumbres que propiciaban la endogamia como una manera de evitar mezclarse con la población indígena, de acuerdo con la Sociedad de Genealogía de Nuevo León.
Esta práctica, que en su momento podría haber sido pragmática, ha evolucionado hasta convertirse en un chiste que muchos repiten sin pensar.
En la actualidad esta creencia también es atribuida a que en el municipio de San Pedro Garza García, el municipio más rico de Latinoamérica, es una práctica para conservar la riqueza entre familias.
También hay que considerar el hecho de que los regios dicen "primo" o “tío” a manera de saludo coloquial, sin que exista una conexión sanguínea.
Además de que hay apellidos que son demasiado comunes como: Garza, de la Garza, Cantú, Treviño, Cavazos, Villarreal, Lozano, Zambrano, entre otros.
Otros apuntan que el mito simplemente surgió como una broma que se salió de control.
Entonces, ¿es real esta creencia? La respuesta parece ser más compleja. Si bien hay elementos históricos que alimentan el estereotipo, el fenómeno es en gran parte un producto de la percepción externa y la cultura popular.