Cerralvo, un municipio de gran relevancia histórica en Nuevo León, fue testigo del primer asentamiento de los colonizadores españoles en la región. Fundado el 22 de abril de 1582 por Don Luis Carvajal y de la Cueva, este lugar se llamó inicialmente León y sirvió como la primera capital del Nuevo Reino de León.
Aunque Don Alberto del Canto descubrió las minas de San Gregorio en 1577 en ese territorio, fue Carvajal quien formalmente fundó la población. Sin embargo, los primeros años de León fueron desafiantes, y con el tiempo, los habitantes buscaron nuevos territorios. En 1626, Don Martín de Zavala refundó la zona bajo el nombre de San Gregorio de Cerralvo.
Durante la invasión estadounidense, conocida como "La Batalla de Monterrey", Cerralvo fue tomado por las tropas extranjeras, que instalaron un campamento en la región. A finales del siglo XIX y principios del XX, la situación mejoró para Cerralvo, y en 1984 fue designado como ciudad.
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El nombre "Cerralvo" tiene su origen en los términos "Cerrus Albus", que se traduce como "Cerro Blanco". Martín de Zavala eligió este nombre para honrar al Virrey de la Nueva España, Don Rodrigo Pacheco y Osorio, quien ostentaba el título nobiliario de Marqués de Cerralvo.
Cerralvo se encuentra a 93 kilómetros de Monterrey, en la zona noreste de Nuevo León. Limita con Agualeguas, General Treviño, Los Herreras, Melchor Ocampo, Doctor González, Los Ramones e Higueras. Con una extensión de 1006.89 kilómetros cuadrados, cuenta con la Sierra de Picachos, uno de los ecosistemas más ricos de la región. Además, alberga el Parque Sabinal, el parque nacional más pequeño de México, caracterizado por la presencia de sabinos centenarios y riachuelos que lo convierten en un oasis.
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